Joe Biden, el dem¨®crata que se sobrepuso a tres grandes tragedias familiares
El nuevo presidente de Estados Unidos ha vivido con el dolor de los accidentes de tr¨¢fico, de las drogas y del c¨¢ncer en sus seres queridos.


Las elecciones presidenciales de Estados Unidos copan las portadas de los medios de comunicaci¨®n de gran parte del planeta. Joe Biden ser¨¢ el 46? presidente del pa¨ªs norteamericano. A punto de cumplir 78 a?os, el dem¨®crata natural de Pensilvania muestra una cara c¨¢lida, afable, y familiar, la misma que present¨® durante su vicepresidencia con Barack Obama y tras la que se esconden tragedias que habr¨ªan hecho tambalear a cualquier ser humano. ?l, en todo momento, ha intentado superarlas con la ayuda de su padre y una frase que le marc¨® en su ni?ez: "Mi padre sol¨ªa decir que no importa cu¨¢ntas veces te tumben, la medida de un hombre est¨¢ en lo r¨¢pido que te pones en pie".
Desde su infancia, Biden ha tenido que luchar contra la tartamudez, muchas veces a base de pu?etazos contra abusones que se re¨ªan de ¨¦l, pero nada comparado como hacer frente al varapalo que sufri¨® apenas unos a?os despu¨¦s de casarse con Neilia Hunter, la madre de sus tres primeros hijos. Cuando Joe tan solo ten¨ªa 30 a?os y su vida le sonre¨ªa al convertirse en senador, su esposa fue a comprar un ¨¢rbol de Navidad junto a los tres peque?os y sufri¨® un accidente de tr¨¢fico: su mujer y su hija Naomi, de tan solo un a?o, murieron en el impacto. Sus otros dos hijos, Beau y Hunter, acabaron en el hospital con lesiones graves. Biden, abatido, se plante¨® acabar con todo, pero decidi¨® luchar para sacar adelante a sus dos hijos, y precisamente ante la cama de Beau en el hospital realiz¨® su juramento como senador. A?os m¨¢s tarde conocer¨ªa a Jill Jacobs, la que en la actualidad sigue siendo su pareja y la que acept¨® a los dos peque?os como si fueran sus hijos. Junto a ella tendr¨ªa otra hija, Ashley.
En 2016 no se present¨® a la presidencia por la muerte de su hijo
Dicen que no hay nada peor en la vida que sobrevivir a un hijo, y Joe Biden ha experimentado esa sensaci¨®n hasta en dos ocasiones. La primera, la mencionada con Naomi en 1972, y la segunda hace apenas unos a?os, en 2016, con la terrible p¨¦rdida de su primog¨¦nito. Mientras Joe disfrutaba de la vicepresidencia de Estados Unidos bajo el mandato de Barack Obama, su hijo Beau era diagnosticado de un c¨¢ncer en el cerebro. Sus s¨ªntomas comenzaron en 2010, pero no recibi¨® la noticia y por tanto el tratamiento hasta 2013. Parec¨ªa que todo mejoraba, pero en mayo de 2015 nuevas pruebas determinaron que el c¨¢ncer hab¨ªa regresado. Diez d¨ªas m¨¢s tarde perd¨ªa la vida.

Biden opt¨® por no presentar su candidatura para sustituir a Obama, y desde entonces ha expresado en m¨¢s de una ocasi¨®n que quiere que su hijo Beau se sienta orgulloso de ¨¦l por todo lo que hace cada d¨ªa. El dem¨®crata siempre hab¨ªa mostrado su admiraci¨®n por su peque?o, sobre todo porque hab¨ªa decidido seguir sus pasos en pol¨ªtica, se hab¨ªa convertido en fiscal general del Estado de Delaware y planeaba llegar a gobernador.
Su hijo Hunter, una vida de lucha contra las adicciones
En uno de los debates con Donald Trump, Biden tuvo que soportar que su oponente sacara a la luz la lucha de Hunter contra el alcoholismo y la drogadicci¨®n. El propio Hunter lo hab¨ªa confesado en The New Yorker, donde asegur¨® que ha sido alcoh¨®lico desde la universidad y que a?os despu¨¦s se introdujo en otras sustancias como el crack y la coca¨ªna. Explic¨® que estuvo una semana fumando crack en Los ?ngeles, que le enca?onaron con una pistola mientras lo compraba en un campamento de yonquis o que se dej¨® todo el material para drogarse en un coche de alquiler junto a una tarjeta del Servicio Secreto estadounidense.
No ha sido el ¨²nico esc¨¢ndalo que ha protagonizado y que ha supuesto un quebradero de cabeza para Biden, puesto que adem¨¢s ha gastado grandes cantidades de dinero en prostitutas, en negocios en Ucrania y en supuestos hijos bastardos. Por si fuera poco, vivi¨® un romance con la viuda de su hermano durante casi a?o, aunque ahora parece que est¨¢ totalmente recuperado y se cas¨® el pasado a?o con Melissa Cohen.

Ese alcoholismo ha sido parte de la familia durante pr¨¢cticamente toda la vida de Joe Biden, pues su hermano peque?o Frankie tambi¨¦n ha necesitado rehabilitaci¨®n y ha tenido deudas de millones de d¨®lares por multas y acuerdos con la justicia por conducir borracho. Joe es un abstemio declarado, y ha reconocido lo mucho que le afecta el comportamiento que ha tenido su hermano: "Ya hay bastantes alcoh¨®licos en mi familia", ha expresado en numerosas ocasiones. Para ayudarle, ha intentado que se rehabilite y le ha introducido en las campa?as para las elecciones.