Una permanencia en diferido

No se recuerda una derrota tan dulce como la sufrida ayer por el Elche en el Mart¨ªnez Valero. El pinchazo del Real Mallorca, en el estadio del Sevilla, sell¨® el billete de la permanencia para los franjiverdes. Un objetivo que bien val¨ªa ser celebrado de otra manera en tierras ilicitanas, pero que de una manera u otra es bien merecido y vale para jugar otro a?o m¨¢s en Primera Divisi¨®n.
Comenz¨® bien el Elche, pero a partir del gol de Cunha el equipo se desinfl¨®. Ya en la caseta, m¨¢s que la charla de Francisco lo importante era poner la radio, enchufar la televisi¨®n o tirar de m¨®vil para ver qu¨¦ suced¨ªa en el S¨¢nchez Pizju¨¢n. Futbolistas, t¨¦cnicos, directivos y, sobre todo, aficionados lo celebraron por todo lo alto.
Del partido cabe resaltar el regreso de Lucas Boy¨¦, totalmente recuperado de su lesi¨®n en el aductor, ante uno de los equipos que han coqueteado con su futuro durante los ¨²ltimos meses. Tambi¨¦n volvi¨® Mojica, otro de los futuribles. Ambos jugaron, parece, su pen¨²ltimo partido en Elche. Falta por ver qu¨¦ dar¨¢n de s¨ª los tres meses de planificaci¨®n y el largo verano que se le presenta a los ilicitanos. Lo que es seguro es que, 47 a?os despu¨¦s, el Elche seguir¨¢ por tercera temporada consecutiva en Primera.