La trayectoria opuesta de Oyarzabal y Marc Roca
Campeones con la Sub-21, Oyarzabal y Marc Roca simbolizan las temporadas de Real Sociedad y Espanyol. Los penaltis acechan al Mallorca.
La conjunci¨®n ideal.
La confluencia entre talento y sacrificio esquiva la pesadumbre. Sin condiciones no hay futuro, aunque sin esfuerzo tampoco hay recompensa. En la Real Sociedad y Oyarzabal se concentran ambas cualidades, vestidos con el traje europeo en la tabla y acumulando actuaciones de m¨¦rito como ante Osasuna. El delantero vasco concibi¨® c¨®mo hacer da?o al bloque rojillo con su habilidad para elegir siempre el movimiento id¨®neo. Desde sus rupturas al ¨¢rea hasta las apariciones por detr¨¢s de Oier y Brasanac, pasando por su fijaci¨®n a Aridane en zonas medias, espole¨® la franqueza ofensiva de un equipo de altos vuelos. El bal¨®n corre en la Real Sociedad y Oyarzabal corre con o sin ¨¦l. En el verano gan¨® el Europeo Sub-21 y se licenci¨® en Empresariales, otro ejemplo m¨¢s de su calidad y capacidad de trabajo.
El contraste.
A Marc Roca, decisivo tambi¨¦n en el t¨ªtulo de La Rojita en Italia, nadie le rebate su genialidad futbol¨ªstica, pero tampoco que es v¨ªctima y parte de la cat¨¢strofe del Espanyol. Se mir¨® a Gallego primero como culpable, ahora tambi¨¦n se despide a Mach¨ªn, medidas que parecen obviar una configuraci¨®n terrible de la plantilla y el bajo rendimiento individual de todos los jugadores. Marc Roca es el s¨ªntoma que lo explica todo. Poco o nada queda de ese medio centro inteligente y de buen pulso del pasado curso. Su error en el primer gol del Legan¨¦s refleja su aflicci¨®n. Esta campa?a promedia cuatro p¨¦rdidas m¨¢s por partido ¡ª13 a 9¡ª y su porcentaje de pases acertados ha bajado del 87% al 82%. Los n¨²meros de Marc Roca son una constataci¨®n m¨¢s de la descomposici¨®n del Espanyol.
Desde el banquillo.
La batalla t¨¢ctica en el Ciutat de Valencia result¨® singular. Tan importante se revel¨® primero la transformaci¨®n del dibujo del Celta a tres zagueros como fueron despu¨¦s los cambios determinantes de Paco L¨®pez. Madrugando el segundo tiempo, quit¨® a Rochina, traslad¨® a Morales a la derecha y coloc¨® una doble punta din¨¢mica con Roger y Mayoral. A la espalda de los carrileros, sacando a los centrales exteriores de zona, el Levante amarr¨® una remontada con sello de autor. Su comodidad en la clasificaci¨®n es un valor innegable de un equipo que se reconoce en su t¨¦cnico. S¨®lo le falta reparar sus concesiones en los c¨®rners defensivos. Ya ha encajado siete goles desde la esquina y Aspas incluso borde¨® el 0-2 que hubiese puesto en negro el duelo ante el Celta.
El apunte.
La derrota viguesa frente al Levante permiti¨® seguir en puestos de salvaci¨®n al Mallorca, el equipo de la extra?a relaci¨®n con los penaltis. Contra el Sevilla volvi¨® a sufrir una pena m¨¢xima en contra, alcanzando la cifra de diez en total, camino de r¨¦cord en LaLiga. El dato de penaltis a favor ¡ª7¡ª no compensa la fatalidad, merecida a no, que le ataca jornada a jornada. Si el Mallorca no sujeta su ¨¢rea, la amenaza del descenso es real.
