La delgada l¨ªnea roja
La delgada l¨ªnea roja que el VAR traz¨® para hacernos creer que Bernardo hab¨ªa incurrido en fuera de juego es la misma que separa al Espanyol esperanzador del que desesperaba.


La delgada l¨ªnea roja que el VAR traz¨® para hacernos creer que Bernardo hab¨ªa incurrido en fuera de juego en ese espejismo que fue el 2-1 es tambi¨¦n la fina franja que separa al Espanyol esperanzador de los tres primeros partidos de Mach¨ªn del que ven¨ªa desesperando. En un abrir y cerrar de ojos, el equipo perico se encuentra de nuevo en el punto de salida, pen¨²ltimo en la tabla, pero esta vez con un calendario inminente que asusta cual Halloween, con Valencia y Atl¨¦tico?como pr¨®ximos rivales.
Dec¨ªamos ayer que la defensa de tres centrales vivir¨ªa su prueba del algod¨®n con los centros laterales del Athletic, y cuatro minutos bastaron para que el mayordomo de Tenn saliera huyendo de San Mam¨¦s con el 1-0. Por si fuera poco, el segundo dio a Mach¨ªn a beber de su propia medicina, el bal¨®n parado, por una inexistente cobertura al rechace en la frontal sobre Muniain. Y el tercer tanto directamente fue una serie de catastr¨®ficas desdichas que parec¨ªan ya desterradas.
Evidenci¨® una vez m¨¢s el Espanyol la falta de gol, y m¨¢s cuando carga con una mochila de dos goles a los 17 minutos. Lo suplic¨® Mach¨ªn, aunque luego recul¨®. Como se ech¨® atr¨¢s el Athletic cuando restaba media hora, como dando alas a unos pericos que jam¨¢s pudieron volar. A los leones, que s¨ª despegan, les hab¨ªa bastado antes con una presi¨®n alta para asfixiar la salida de bal¨®n. Esa l¨ªnea roja tampoco la super¨® el Espanyol de Mach¨ªn, que ten¨ªa un plan, pero no una varita m¨¢gica.