Francia llega sin avasallar
Oportunidad para la revancha. Francia es el anfitri¨®n y el favorito, pero no ha sido hasta ahora un equipo avasallador. Ha jugado mucho al tran tran y ha abanderado m¨¢s sus valores revolucionarios de igualdad y de fraternidad que el de la libertad, en un equipo donde el t¨¦cnico Vincent Collet lo tiene todo atado y controlado. Tan solo Parker tiene alguna licencia a la improvisaci¨®n, siempre que no se pase. Es tambi¨¦n el equipo que menos puntos ha recibido por partido en el torneo, aunque m¨¢s por calidad defensiva que por ritmo, porque su baloncesto yo-yo no es tan cansino como el de Grecia. Su defensa no quiere que tires poco, quiere que tires en mala condici¨®n, no quiere zancadillearte, quiere cavarte hoyos para que te caigas t¨² solo. Parker y Batum han estado muy por debajo de su nivel real, De Colo ha sido su jugador m¨¢s importante y Lauvergne una sorpresa en positivo.
Un base y un p¨ªvot. Italia y Lituania mostraron hechuras de semifinalistas. Sin embargo les diferenci¨® el abc del baloncesto: un base y un p¨ªvot. Eso es lo que te ordena y te da rigor cuando emergen la fatiga y la presi¨®n: Lituania tuvo en Kalnietis y Valanciunas? lo que le falt¨® a Italia en la pr¨®rroga, un base para frenar las p¨¦rdidas de bal¨®n y un p¨ªvot al uso para defender bajo el aro a Valanciunas, curiosamente, el sustituto natural de Bargnani en los Toronto Raptors. Puestos a elucubrar y a hacer quinielas, tener en julio de 2016 a Grecia, Italia y Canad¨¢ con plaza asegurada en el Preol¨ªmpico no ser¨¢ una buena noticia para los que pierdan en semifinales.
Las variantes serbias. Serbia vivi¨® tres cuartos con la Rep¨²blica Checa atragantada. Se le atragantaba porque no masticaba. Cuando Djordjevic?, con vistas al ¨²ltimo cuarto, convenci¨® a incisivos, caninos y molares a morder, a triturar, qued¨® listo para la degluci¨®n el bolo alimenticio checo, a merced de los balc¨¢nicos para una nueva digesti¨®n. El equipo de Satoransky y Vesely anot¨® 21 puntos en el primero, en el segundo y en el tercer cuarto, pero la defensa serbia dej¨® en 12 a los checos en el ¨²ltimo periodo, con una serie de 4 de 16 en tiros de campo. En ataque, Serbia te amenaza vestido de moro y vestido de cristiano, con Raduljica de v¨¦rtice o con sus dos grandes (Bjelica y Erceg) abiertos en la l¨ªnea de tres puntos.