EE UU, a la final sin despeinarse

En modo espera. 24 horas despu¨¦s de la gran decepci¨®n de la eliminaci¨®n de Espa?a no hay repercusiones ni noticias sobre los protagonistas. Al igual que no es de recibo la escasa atenci¨®n a la prensa, y por extensi¨®n a los aficionados, la noche de autos tras el descalabro, ahora lo m¨¢s sensato es dejar que los d¨ªas enfr¨ªen las reacciones y los sentimientos. Hay prisa por sacar conclusiones, no tanto por tomar medidas.
El tercer cuarto. Hay libertad, es una cuesti¨®n de gusto. Mientras se gane cada uno que lo haga cuando pueda. La mayor¨ªa gana los partidos en el ¨²ltimo cuarto, por eso los detractores del baloncesto dicen que es un deporte donde solo hace falta ver los dos ¨²ltimos minutos. Con esta selecci¨®n de USA estos cr¨ªticos se quedan sin argumentos, porque el equipo de Krzyzewski gana sus partidos en el tercer periodo. Si en cuartos de final el parcial de USA contra Eslovenia fue de 37 a 22, en la semifinal contra Lituania el equipo estadounidense endos¨® un marcador de 33 a 14 en ese tercer cuarto. No es una cuesti¨®n de evoluci¨®n natural de las reservas f¨ªsicas, se trata de algo premeditado, de una programaci¨®n muy efectiva por lo que les demuestra la experiencia partido tras partido. Varios jugadores se desempe?an en la primera mitad con un aire de trote mantenido y contrastan en el tercer cuarto con series cortas de anticipaci¨®n, reacci¨®n y sprint que descuadra a los rivales, pese al conocimiento previo de lo que va a ocurrir.
Mundial ¡®light¡¯. EE UU ha llegado a la final sin despeinarse, con m¨ªnima exigencia por parte de los rivales que le han tocado en suerte. Equipos generalmente de menor carga t¨¢ctica, de menor control, menos pizarra e inferior dominio del baloncesto especulativo que en la l¨ªnea general de los equipos que han disputado las eliminatorias en Madrid. Una realidad apoyada por el gran n¨²mero de bajas de jugadores importantes en este Mundial (17 solo en la selecci¨®n USA) y quiz¨¢s con la expansi¨®n de la mentalidad estadounidense de poca estima hacia la Copa del Mundo en el baloncesto europeo. En los ¨²ltimos a?os, se aprecia que jugadores del viejo continente, muchos de ellos con experiencia en la NBA, han reconocido el Eurobasket por encima del Mundial a la hora de acceder a las convocatorias.