Una entidad con letra y m¨²sica
M¨¢s all¨¢ de los buenos resultados que Rafa Ben¨ªtez est¨¢ cosechando como m¨¢nager del Liverpool, creo que su gran labor en Anfield hay que estimarla a¨²n m¨¢s porque ha recuperado el orgullo scouser, que parec¨ªa sumido en la resignaci¨®n de los nuevos tiempos, estos en los que el ¨¦xito s¨®lo parec¨ªa estar reservado para la fortaleza del m¨²sculo financiero-futbol¨ªstico del Chelsea de Abramovich y Mourinho. Ben¨ªtez ha sabido cambiar esa inercia victimista, aunque el azar le ayud¨® en aquella inolvidable final de hace dos a?os de Estambul.
El secreto del entrenador madrile?o es que ha entendido el peso de lo que supone la tradici¨®n en este singular y admirable club, que teniendo como sede y soporte una ciudad de s¨®lo 450.000 habitantes es el primero de Inglaterra por t¨ªtulos de Liga (18) y el tercero en el continente por Copas de Europa (5). Y si hablamos de tradici¨®n hay que remitirse a Bill Shankly. Este genial m¨¢nager escoc¨¦s recogi¨® (1959) al equipo hundido en Segunda y lo rescat¨® para las grandes citas pero, sobre todo, edific¨® sobre sus brillantes frases ("el f¨²tbol no es una cuesti¨®n de vida o muerte, es mucho m¨¢s que eso", entre otras muchas) una manera de entender el f¨²tbol que todav¨ªa se respira en Anfield.
Shankly puso la letra, el rigor y una cultura del sacrificio que con Ben¨ªtez tienen m¨¢s vigencia que nunca. Tambi¨¦n se puede decir que el Liverpool tiene con m¨²sica (no tenerla en la ciudad de los Beatles ser¨ªa un pecado) porque el You'll never walk alone (canci¨®n del musical Carrousel, estrenado en 1945 y despu¨¦s versionada por Gerry and the Pacemakers) es un referente para todos los aficionados, menos para los del Everton, claro.