El d¨ªa que Alonso perdi¨® cinco kilos y se desmay¨® en Bahr¨¦in
El sistema de agua del R29 se rompi¨® y el asturiano sufri¨® una bajada de tensi¨®n que le provoc¨® un desmayo mientras atend¨ªa a los periodistas.

Hay momentos en la carrera de un piloto que no se olvidan. Suelen ser los podios, las victorias o los t¨ªtulos por norma general, pero hay otros que sin ser parte de esas alegr¨ªas tambi¨¦n permanecen en el recuerdo. Este es el caso del desmayo de Fernando Alonso tras el GP de Bahr¨¦in del a?o 2009, momento inmortalizado con una foto que a¨²n da para bromas y ¡®memes¡¯ once a?os despu¨¦s.
Aquella temporada no estaba siendo f¨¢cil para Alonso. El Renault R29 estaba lejos de los mejores y eso le oblig¨® a exprimir el coche a¨²n m¨¢s de lo habitual. Las temperaturas en el desierto de Bahr¨¦in son extremas y en 2009, a la hora de la carrera, la ambiental no baj¨® de los 38? y en pista alcanz¨® los 51?. Fue una carrera dur¨ªsima para el asturiano, que consigui¨® acabar en los puntos (8?), calificando su actuaci¨®n como "la mejor de los dos ¨²ltimos a?os".
Totalmente exhausto, Alonso se baj¨® del coche y tras refrescarse se encamin¨® hacia la zona de entrevistas. El ovetense se mostr¨® contento por el resultado, pero poco a poco fue torciendo el gesto y respondiendo a las preguntas lo m¨¢s brevemente posible, hasta que perdi¨® la consciencia en frente de las c¨¢maras. El personal del equipo se lo llev¨® al garaje de Renault y all¨ª pudo recuperarse r¨¢pidamente para atender al resto de medios all¨ª presentes. "Cuando estaba en la zona de entrevistas me empec¨¦ a marear un poquito y cuando acab¨¦ de hablar con las teles ya no me acordaba y lo que s¨¦ es que despu¨¦s me encontraba en el box, sentado con un ventilador en la cara", contar¨ªa Alonso m¨¢s tarde.
El equipo Renault confirm¨® que aquel desmay¨® se debi¨® a una bajada de tensi¨®n provocada por un fallo en el sistema que el monoplaza tiene para beber agua, lo que le impidi¨® a Alonso hidratarse durante gran parte de carrera. Por si fuera poco, un manguito del radiador se rompi¨®, elevando la temperatura en el cockpit?unos10? m¨¢s. El esfuerzo fue tal que la b¨¢scula a la que acuden los pilotos al bajarse del coche revel¨® que el espa?ol hab¨ªa perdido alrededor de cinco kilos.