La absurda pol¨ªtica contra la marihuana que defiende la NFL
La ¡°Guerra Contra la Marihuana¡± que mantiene la NFL desde hace muchos a?os est¨¢ muy lejos de la realidad de la ciencia m¨¦dica y la sociedad contempor¨¢nea americana.</br><a title="Super Bowl LII en vivo online: Patriots vs Eagles en directo, Final NFL 2018" href="https://us.as.com/us/2018/02/04/nfl/1517778540_975721.html">Patriots-Eagles: Super Bowl LII en vivo</a>
Una pol¨ªtica absurda basada en una ancestral concepci¨®n de la sustancia, como si fuera aquella pel¨ªcula propagand¨ªstica de 1936, Reefer Madness (en espa?ol, Locura de la marihuana), donde se contaba como varios j¨®venes se volv¨ªan locos por fumar marihuana, asesinaban, robaban, agred¨ªan, o aquel anuncio ochentero de?Winners Don¡¯t Do Drugs.
En l¨ªneas generales, las asociaciones u organizaciones deportivas tienen reglas contra el uso de drogas por tres razones: 1) la sustancia en cuesti¨®n act¨²a mejorando el rendimiento del atleta y le da una ventaja injusta; 2) amenazan la salud y bienestar del atleta; y 3) causa una mala percepci¨®n en la imagen de dicha asociaci¨®n. Ninguna de las tres razones se cumplen en el caso de la actitud que tiene la NFL contra la marihuana, y lo ¨²nico que est¨¢ haciendo esta pol¨ªtica es da?ar a la propia instituci¨®n y a los jugadores que juegan el deporte.
No mejora el rendimiento

Creedme, lo he intentado. El jugador no va a ser m¨¢s fuerte, r¨¢pido, saltar m¨¢s, coger m¨¢s balones, pasarlos mejor, placar de forma m¨¢s bestia...por fumar porros de vez en cuando. Lo ¨²nico que puede hacer es controlar la ansiedad de un jugador, un mal muy com¨²n por cierto en una esfera muy exigente. Por lo tanto, estamos hablando de beneficios psicol¨®gicos para el atleta, como si se toma un vino a llegar a casa o se va a un concierto de jazz.
Es m¨¢s, todo lo contrario, la marihuana resta concentraci¨®n, coordinaci¨®n motora, precisi¨®n y habilidades, te mueves m¨¢s lento. En un deporte que requiere gran despliegue f¨ªsico, y tambi¨¦n de memoria para recordar el playbook, la hierba no es la mejor forma conseguir una ventaja competitiva. Como tampoco lo es bajarse un ¡°six pack¡± antes de un partido o un entrenamiento.
La marihuana no merm¨® las capacidades atl¨¦ticas de Ricky Williams, pero s¨ª la NFL le quit¨® un a?o de ellas, al igual que nos ha privado de ver recompensadas las habilidades de prospects como Randy Moss o Tyrann Mathieu con mejores rondas del draft. El ¨²ltimo caso es el de Randy Gregory, defensive end de Nebraska que dio positivo en el control antidoping del NFL Combine 2015; Gregory entrar¨¢ en el llamado ¡°programa de desintoxicaci¨®n¡± de la NFL y est¨¢ por ver si cae del top 10 de primera ronda que se prev¨¦.
No es un riesgo para la salud

Con matices. La marihuana crea ciertos da?os neurol¨®gicos y una adicci¨®n. Pero los jugadores suelen tomarse tortillas de analg¨¦sicos: Percodan, Vicodina, Demerol, Dilaudid...No s¨®lo su ingesta prolongada puede dejar el h¨ªgado para pat¨¦, sino que la adicci¨®n que crean es mucho mayor que unos porros de hierba. Por no hablar de las inyecciones pre-partido.
La pol¨ªtica caducada de la NFL con la marihuana castiga a los jugadores que buscan alternativas a los analg¨¦sicos, manteni¨¦ndolos en un estado perpetuo de lesiones, adem¨¢s de las posibilidades de crear adictos. La Liga est¨¢ da?ando a los jugadores, no protegiendoles. ¡°La marihuana no desconecta la consciencia sobre tu cuerpo que la mayor¨ªa de los medicamentos s¨ª hacen¡±, dijo hace poco Ricky Williams, ¡°a mi me ayudaba a relajar mi cuerpo, iba a la habitaci¨®n, hac¨ªa algo de yoga y mi cuerpo se recuperaba m¨¢s r¨¢pido¡±.
Las sobredosis por analg¨¦sicos mata a 46 estadounidenses cada d¨ªa seg¨²n el Centro de Control y Prevenci¨®n de Enfermedades. Las mismas pastillas que dan en esos cl¨¢sicos botes de pl¨¢stico a los jugadores cuando tienen una lesi¨®n. ?Deber¨ªa la NFL prohibir por lo tanto los analg¨¦sicos? Lo mismo el poderoso lobby de la industria farmace¨²tica tiene que decir algo al respecto. ?Por qu¨¦ no proh¨ªbe el caf¨¦, los chicken nuggets o el alcohol (de este ¨²ltimo Obama dijo que es m¨¢s peligroso que la marihuana) si da?an la salud m¨¢s que unas onzas de ¡°mar¨ªa¡±?
Reducir y/o eliminar las sanciones por consumo de marihuana y apoyar la posibilidad de introducirla como ayuda terap¨¦utica, tanto f¨ªsica como psicol¨®gica, ser¨ªa un primer paso para la Liga para tener un acercamiento social a nuestros d¨ªas.
No est¨¢ mal visto

El 50% de los americanos cree que la marihuana deber¨ªa ser legalizada. A fecha de hoy, en tres estados (Alaska, Colorado y Washington) es legal su uso recreativo y comercial, y en 23 la hierba es un medicamento m¨¢s que el m¨¦dico puede recetar. No es s¨®lo Am¨¦rica. Seg¨²n una encuesta informal de MMQB, m¨¢s de la mitad de los jugadores de la NFL fuma hierba de forma regular, incluso algunos jugadores como el ex punter de los Vikings Chris Kluwe apunt¨® a que la cifra debe rondar el 70%.
Si lo que le preocupa a la NFL es su imagen p¨²blica, quiz¨¢ deba prestar m¨¢s atenci¨®n en el pasado bochornoso verano que nos regal¨® gestionando la sanci¨®n de Ray Rice con dos partidos (inicialmente) por pegar una paliza a su novia y, al mismo tiempo, dejando casi toda la temporada sin jugar a Josh Gordon por fumar m¨¢s porros de la cuenta.
No tiene sentido concebir la marihuana como un peligro para el rendimiento y salud del jugador ya que la concepci¨®n social como los avances cient¨ªficos han probado lo contrario. No solo da?a la imagen de la liga como asociaci¨®n sino que erosiona el desarrollo f¨ªsico y psicol¨®gico del atleta. Levantar la a?eja mentalidad y pol¨ªtica de sanciones permitir¨ªa deja de prohibir y empezar a educar. Hasta la NFL tendr¨ªa el control de algo que est¨¢ ya incontrolado.