Durant (36+11+8) decide en la pr¨®rroga la gran fiesta de Kobe
Entre homenajes a La Mamba, que vio brillar por primera vez sus dos n¨²meros en el cielo del Staples, Durant no perdon¨® en el momento de los grandes.

Las entradas m¨¢s caras desde el d¨ªa que dej¨® el baloncesto (Mamba Out) para presenciar un homenaje que ya es, como todo lo que toc¨® Kobe Bryant durante sus 20 a?os en la liga, historia del baloncesto. El cielo del Staples recibi¨® orgulloso las dos versiones de La Mamba (primer jugador con dos n¨²meros retirados por una misma franquicia) mientras compa?eros, ¨ªdolos y fans sonre¨ªan con la misma ilusi¨®n que el propio Kobe. Y en un d¨ªa en el que los Lakers, la NBA y el mundo del baloncesto rend¨ªan homenaje al ¨²ltimo gran killer, ten¨ªa que ser Kevin Durant (el gran asesino de la siguiente generaci¨®n) quien se llevara el gato al agua.
Con Kobe y familia disfrutando en primer fila, el partido no estuvo a la altura del momento. Igualado hasta el final, una emocionante pr¨®rroga termin¨® escondiendo un partido de idas y venidas m¨¢s locas que controladas y rachas horrorosas en el tiro.
Sin Stephen Curry, sin Draymond Green, sin Shaun Livingston, sin Zaza Pachulia y con Kevin Durant y Klay Thompson fallando como escopetas de feria, los Warriors mandaron durante gran parte del encuentro. Sin despegar (se pon¨ªan sus propias zancadillas), momentos brillantes de secundarios como Nick Young (los triples), Jordan Bell (los tapones) y Omri Casspi (los cortes) fueron suficientes para mantener con ventaja a los de la Bah¨ªa. Pero los Lakers, con un genial tercer cuarto de Kuzma (25, d¨¦cimo partido de +20 puntos) y un Brandon Ingram que ahora es todo coraz¨®n (ataca, ataca y vuelve a atacar), peleaban contra s¨ª mismos por una victoria especial, una victoria para Kobe.
Tras cinco minutos sin anotar en el ¨²ltimo cuarto que les deber¨ªan haber costado el partido, un triple de Caldwell-Pope y una bandeja de Ingram (19+6+5, con el p¨®mulo tocado en los minutos importantes despu¨¦s de recibir un tap¨®n bestial de Bell) mandaron el partido al tiempo extra. La Mamba dej¨® el parqu¨¦ con su familia y entonces empez¨® el show de Durant, que estaba teniendo una noche horrible en el tiro: 12 puntos en los ¨²ltimos cinco minutos, cuatro de las cinco canastas en juego de los Warriors y, por supuesto, la estocada. Tan elegante como de costumbre.
Cerca estuvo Lonzo (16+6+6) de darle la vuelta a la tortilla (qu¨¦ bombazo hubiera sido...), pero sus siete puntos en la pr¨®rroga no fueron suficientes contra la mirada asesina de Durant (36+11+8+3). El en¨¦simo homenaje a La Mamba.?