El jefe le llama mercenaria por pedir un merecido aumento de sueldo y su respuesta provoca un tsunami de reacciones: ¡°No me va a achantar¡±

Ni en el mundo laboral, ni en otros tantos aspectos de la vida, es oro todo lo que reluce. Cuando lo prometido, que es deuda ¡ªtodav¨ªa m¨¢s si hay r¨²brica de por medio¡ª, sufre alg¨²n tipo de cambio, es l¨®gico que brote la necesidad de pedir una explicaci¨®n. El problema surge cuando, antes incluso de resolver dicho desajuste, el disgusto se hace patente por la voluntad que tiene aquel que firma de conocer los detalles del viraje. Esto mismo le ha ocurrido a Celia Ortiz, una creadora de contenido espa?ola que ha hecho f¨¢cil el resumen de su indignante caso particular, explicado en sus redes sociales: ¡°Me llamaron mercenaria por pedir un aumento de sueldo y todav¨ªa no lo he superado¡±.

Fue un asunto peliagudo. ¡°Yo estaba en una empresa, hac¨ªa unas funciones de comunicaci¨®n y, de repente, decidieron que yo me iba a encargar de la comunicaci¨®n de la propia empresa, haciendo cosas absolutamente nuevas y diferentes que no estaban en contrato¡±, explica la tiktoker, que hace presagiar el futuro de su relato con apenas cinco palabras: ¡°Nadie me habl¨® de dinero¡±.

¡°Os pod¨¦is imaginar mi careto¡±

Tras el anuncio de su apasionante nuevo rol, Celia puso los pies sobre la tierra y, consciente de que iba a hacer m¨¢s por lo mismo, quiso reclamar un aumento de sueldo o, por lo menos, escuchar la explicaci¨®n que nunca le dieron. ¡°Me arm¨¦ de valor y sub¨ª a ver al director de la empresa, le expongo la situaci¨®n, se me queda mirando y me dice que le he decepcionado much¨ªsimo¡±, cuenta.

Resulta que, seg¨²n Ortiz, su jefe insisti¨® en que ¡°en esta empresa no quiere a nadie que venga a trabajar por dinero¡± porque ¡°trabajar por dinero es cosa de mercenarios¡± y que ¨¦l ¡°lo que quiere son empleados comprometidos¡±. Celia no daba cr¨¦dito: ¡°Os pod¨¦is imaginar mi careto en el momento en el que me lo dec¨ªa¡±.

Ocurr¨ªa que, a ojos de la tiktokter espa?ola, ¡°el t¨ªo era muy listo y sab¨ªa que yo estoy empezando mi carrera profesional y que dici¨¦ndome esas cosas me iba a achantar un poquito¡±. No fue as¨ª. ¡°No me va a achantar; muy orgullosa, le dije que no aceptaba esas responsabilidades si no hab¨ªa un aumento de sueldo. Porque s¨ª, soy una que va a trabajar por dinero¡±, asevera, consumida por la injusticia de la situaci¨®n, a lo que a?ade una expresi¨®n que hace las veces del culmen del hartazgo: ¡°F¨ªjate t¨²¡±.

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