Una m¨¦dico ucraniana ¡®roba¡¯ el Instagram de David Beckham
El exjugador ingl¨¦s ha cedido su cuenta a la directora del centro perinatal de J¨¢rkov para que la doctora muestre al mundo las consecuencias de la invasi¨®n.
Son muchos los rostros conocidos tanto a nivel nacional como internacional que, a trav¨¦s de las redes sociales, han mostrado su apoyo y solidaridad al pueblo ucraniano. Miles de civiles que est¨¢n sufriendo las terribles consecuencias de la invasi¨®n rusa y que se ven obligados a huir de su pa¨ªs para convertirse en refugiados de guerra. Uno de los famosos que no ha dudado en ayudar desde su medi¨¢tica posici¨®n es David Beckham.
El exfutbolista, que suma m¨¢s de 71 millones de seguidores en Instagram, lleva desde el primer d¨ªa de invasi¨®n muy vinculado a la defensa de los ucranianos. En su perfil, ha publicado numerosas im¨¢genes donde denuncia las atrocidades que est¨¢ cometiendo Putin, adem¨¢s de iniciar una recaudaci¨®n de fondos a trav¨¦s de su fundaci¨®n para Unicef con el objetivo de brindar todo su apoyo a los millones de ni?os y familias afectados por la guerra. Y no solo eso, ya que el matrimonio Beckham ha decidido donar un mill¨®n de d¨®lares de su propio bolsillo.
La implicaci¨®n de David Beckham no se limita solo a eso. El exjugador ingl¨¦s tambi¨¦n ha cedido su cuenta de Instagram a la directora del centro perinatal de J¨¢rkov para que la m¨¦dico ucraniana Iryna Kondratova pueda tener acceso a su gran cantidad de seguidores con el objetivo de que su denuncia llegue a todos los rincones del planeta. La doctora explica de primera mano qu¨¦ sucede en la ciudad y en qu¨¦ estado se encuentra la sala de neonatolog¨ªa que se ha trasladado a un s¨®tano a consecuencia de los incesantes bombardeos de Putin.
Una ¡®ventana¡¯ al mundo
¡°Hoy, me pongo a las riendas de la cuenta de Instagram de David Beckham¡±, comienza diciendo. Iryna Kondratova muestra al mundo en qu¨¦ condiciones se ven obligados a trabajar ella y el resto de personal del hospital para poder garantizar la salud de los pacientes. Decenas de madres embarazadas y de beb¨¦s que pasan sus d¨ªas en un s¨®tano entre ¡°cuidados intensivos¡± y pocos recursos. ¡°Puede que estemos arriesgando nuestras vidas, pero no pensamos en eso en absoluto. Nos apasiona nuestro trabajo. Los m¨¦dicos y enfermeras de aqu¨ª nos preocupamos y lloramos, pero ninguno de nosotros se dar¨¢ por vecino¡±, sostiene.