TELEVISI?N
Un reportero de Telemadrid, amenazado a punta de navaja en pleno directo
Luis Fiuza trataba de entrevistar en la calle al padre de un presunto estafador cuando este le sac車 una arma blanca: ※La polic赤a soy yo§.
El reportero de Telemadrid Luis Fiuza vivi車 esta semana una de las conexiones m芍s complicadas de toda su carrera. Como parte de su trabajo en Madrid Directo, el periodista se desplaz車 al barrio de Campamento para hablar con una vecina que supuestamente hab赤a trabajado con Enrique, el presunto estafador de comercios que est芍 buscado por la justicia. Se le acusa de timar a varios clientes pidi谷ndoles dinero por adelantado para distintas reformas y reparaciones que posteriormente no se produc赤an.
El equipo de Telemadrid se desplaz車 a la zona y consigui車 encontrar, de pura casualidad, al padre del protagonista de esta historia, aunque la presencia de los medios no fue de su agrado. De hecho, antes de comenzar a hablar ya estaba apuntando la matr赤cula del coche: ※Muy sencillo, no me film谷is tanto, filma a tu madre§, espetaba mientras trataba de huir de la escena.
※No quiero saber nada de vosotros. ?Sois unos sinverg邦enzas! As赤 que no me pregunt谷is. No ten谷is que meteros§, expresaba mientras trataba de cubrir su rostro con una bolsa. El reportero, intentando desplegar un tono tranquilo y conciliador, le confes車 el motivo de su visita, pero el hombre lo ten赤a muy claro y su enfado solo hizo que aumentar, esta vez dirigi谷ndose hacia el c芍mara: ※Sois unos sinverg邦enzas. Me voy a cagar en la... Te voy a dar una patada. Hijo de la gran puta§, gritaba mientas corr赤a tras el empleado de Telemadrid que llevaba a cabo la grabaci車n.
Una navaja aumenta la tensi車n
Ante la at車nita mirada de una transe迆nte y acompa?ado de inservibles mensajes de calma, el entrevistado hurg車 en el bolsillo de su pantal車n y sac車 una navaja con la que se dirigi車 nuevamente hacia el c芍mara. Fiuza le agarr車 del brazo para evitar que se abalanzara su compa?ero, pero lo 迆nico que consigui車 es que el hombre cambiara de objetivo y fuera a por 谷l.
Ni siquiera las amenazas de llamar a la polic赤a disminuyeron el enfado del protagonista, que total confianza espet車 un contundente ※la polic赤a soy yo§. Finalmente los empleados de Telemadrid tuvieron que abandonar el lugar despu谷s de una de las entrevistas con m芍s tensi車n que se recuerdan.