Tamara Gorro reflexiona sobre su depresi¨®n: ¡°Echo de menos no depender de infinidad de pastillas¡±

Tamara Gorro contin¨²a en su ardua lucha contra los problemas de salud mental que arrastra desde hace un a?o y medio. La popular televisiva sufre ¡°ansiedad mental¡± y una ¡°depresi¨®n grave con trastorno de ansiedad¡±, dos trastornos a los que se est¨¢ enfrentando gracias a la ayuda de su psic¨®logo y de su psiquiatra con un tratamiento m¨¦dico que le ha provocado un fuerte desgaste f¨ªsico del que ha hablado en m¨¢s de una ocasi¨®n a trav¨¦s de las redes sociales.

Y es precisamente en las redes sociales donde Tamara Gorro ha encontrado su lugar ya que en Instagram recibe numerosos mensajes de cari?o y apoyo que le hacen esta lucha personal mucho m¨¢s f¨¢cil. Con m¨¢s de dos millones de seguidores, la televisiva tambi¨¦n utiliza dicha plataforma como herramienta important¨ªsima para visibilizar las enfermedades de salud mental. La que fuera tronista de ¡®Mujeres y hombres y viceversa¡¯ busca, con su exposici¨®n medi¨¢tica, ¡°desestigmatizar¡± su enfermedad, aunque sin ¡°despatologizarla.

¡°Hay que seguir caminando, dentro de las limitaciones que supone. Por estar enferma no tengo que meterme en una cueva, es m¨¢s, tengo que asumir que ahora forma parte de mi vida¡±, comienza reflexionando. Poco a poco, Tamara Gorro est¨¢ volviendo a la vida social donde ya se le ha podido ver en alg¨²n que otro evento, o celebrando su cumplea?os con una fiesta rodeada de sus seres m¨¢s queridos donde tampoco falt¨® su ex, Ezequiel Garay.

Su particular reflexi¨®n

Tamara tambi¨¦n reflexiona sobre c¨®mo era su vida antes de este bache; una vida que est¨¢ dispuesta a recuperar con todas sus fuerzas. ¡°Este camino es as¨ª, pero se que tambi¨¦n tiene fin, o al menos as¨ª visualizo yo mi futuro, aunque ahora no le vea final¡±, dice. ¡°Eso s¨ª, echo y mucho de menos que mi cabeza no tenga que depender de una medicaci¨®n e infinidad de pastillas¡±, afirma. La empresaria termina su discurso animando a todos a sonre¨ªr pese a las circunstancias adversas y recordando que no hace falta sufrir una enfermedad mental ¡°para caerse o vivir un gran baj¨®n¡±.