¡°?Qu¨¦ miras, bobo?¡±: la frase de Messi que aparece en un monasterio del siglo XVI
Pedro Rodrigues acu?¨® la expresi¨®n m¨¢s viral del futbolista argentino en el monasterio de Samos, en la provincia de Lugo, en un medall¨®n a modo de broma.
Con la tensi¨®n de lo sucedido sobre el c¨¦sped del Estadio Lusail todav¨ªa candente, Leo Messi pronunci¨® una de las frases m¨¢s virales del Mundial de Qatar al futbolista holand¨¦s Wout Weghort. ¡°?Qu¨¦ miras, bobo?¡±, le espet¨® a su rival en plena zona mixta mientras atend¨ªa a un medio de comunicaci¨®n argentino. Una expresi¨®n que r¨¢pidamente se viraliz¨® en las redes sociales hasta el punto de descubrir una de las casualidades m¨¢s sorprendentes de la historia del f¨²tbol.
Y es que resulta que esas mismas palabras que articul¨® el destacado como mejor jugador del torneo aparecen escritas en un medall¨®n del monasterio de San Juli¨¢n de Samos (Lugo), un edificio fundado en el siglo VI que fue reconstruido en el siglo XVI tras un incendio. Su autor fue el cantero Pedro Rodrigues.
La obra de arte recoge la expresi¨®n de forma circular en un ejemplo de lo que se conoce como ¡°picaresca medieval¡±. Al parecer, tal y como detalla la web del que es el monasterio m¨¢s antiguo habitado en la actualidad en Espa?a, Rodrigues pretend¨ªa con estas palabras bromear con los visitantes para instarles de esa manera a adentrarse en su interior.
En pleno Camino de Santiago
El lugar en el que se encuentra el medall¨®n de referencia yace en las orillas del r¨ªo Sarria y es uno de los templos que se pueden visitar en pleno Camino de Santiago Franc¨¦s. De hecho, los peregrinos tienen incluso la posibilidad de pernoctar en un albergue que se encuentra en las dependencias del monasterio a cambio de la voluntad.
Tambi¨¦n se puede llegar a la abad¨ªa por carretera en un trayecto de unos 45 minutos partiendo desde Lugo hacia el sur de la provincia. Las visitas tur¨ªsticas cuestan cinco euros que van destinados al mantenimiento del edificio y de la comunidad que reside en ¨¦l. Por supuesto, en el precio va incluido el visionado de un medall¨®n que ya anticipaba hace unos 440 a?os uno de los momentos m¨¢s ic¨®nicos de la historia de los Mundiales.