CINE
Qu¨¦ fue de Billy Bob Thornton, el m¨ªtico Pap¨¢ Noel de ¡®Bad Santa¡¯
El actor volver¨¢ al ruedo en 2024 junto a Milly Bobby Brown tras una d¨¦cada de casi nula aparici¨®n en la gran pantalla.
Corr¨ªa el a?o 2003 cuando Terry Zwigoff se aventuraba en el pantanoso g¨¦nero cinematogr¨¢fico de la Navidad, campo muchas veces sembrado y, en lo que a ¨¦xitos respecta, pocas veces cosechado. Esta vez iba a ser diferente. El director hizo uso del humor negro para darle una vuelta al icono de Pap¨¢ Noel, presentando una ant¨ªtesis de su figura tradicional y convirti¨¦ndole, a fin de cuentas, en eso que da t¨ªtulo a la cinta: un Bad Santa.
Quien se visti¨® de rojo y de penas fue Billy Bob Thornton al introducirse en la piel de Willie Stokes. Su historia, como si de un pacto entre desgraciados hubiera salido, naci¨® una fr¨ªa noche de diciembre en un bar de Milwaukee. All¨ª est¨¢ ¨¦l. Bebiendo, fumando. Esperando a nada, quiz¨¢ a la vida. Solitario. Se dedica a ejercer como Pap¨¢ Noel en un centro comercial, donde, en compa?¨ªa de su amigo Marcus (Tony Cox), quien hace de duende, entretiene a los ya de por s¨ª distra¨ªdos compradores. El crudo retrato, casi dickensiano y propio del siglo XXI, puede ser m¨¢s desolador: son ladrones.
Como hacen cada v¨ªspera de Navidad, desconectan la alarma de seguridad despu¨¦s de que el centro comercial eche abajo las persianas met¨¢licas y revientan la caja fuerte. El argumento del filme se centra en las complicaciones que presenta el ¨²ltimo de sus golpes, custodiado por un jefe de seguridad que desde el primer momento sospecha de ellos. Y as¨ª, entre persecuciones que parecen sacadas de un sue?o aleatorio, se hila una trama que es a la Navidad en el cine lo que un viaje a la cara oculta de la Luna para la ingenier¨ªa aeroespacial.
En esta comedia brilla Thornton, que entiende c¨®mo encaja la interpretaci¨®n en esta dif¨ªcil linde. As¨ª lo ha demostrado tambi¨¦n en otros trabajos, tanto posteriores como anteriores. El int¨¦rprete, nacido en Arkansas all¨¢ por 1955, tuvo una infancia marcada por el Protestantismo metodista al que se adher¨ªa su familia. Jug¨® al beisbol y trabaj¨® colocando asfalto en carreteras casi olvidadas por los mapas estatales. Y como si de un intra-sue?o americano se tratase, a mediados de los ochenta se muda a Los ?ngeles y comienza a dedicarse a la interpretaci¨®n.
Del culmen a la casi desaparici¨®n
Su carrera es completamente vertical, lenta y exitosa. Si bien abri¨® la d¨¦cada como actor de telemarketing en un parque e¨®lico, termin¨® la siguiente ganando el Oscar a mejor guion adaptado por Sling Blade en 1996. Siendo ya alguien con renombre en la industria, tras haber iniciado y cortado una relaci¨®n de dos a?os con Angelina Jolie, se lanza de lleno a la aventura de Bad Santa y, tambi¨¦n en 2003, aparece en Love Actually haciendo, nada m¨¢s y nada menos, que de Presidente de los Estados Unidos. Un a?o despu¨¦s recibe su propia estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. Buenos tiempos.
La primera d¨¦cada del nuevo siglo fue pr¨®spera y as¨ª se refleja en la densa cantidad de proyectos en los que particip¨®. El culmen lleg¨® en 2014 de la mano de Fargo, donde su interpretaci¨®n del carism¨¢tico antagonista Lorne Malvo le vali¨® un Globo de Oro a mejor actor en una miniserie; otro m¨¢s recibi¨® dos a?os despu¨¦s por su papel como Billy McBride en Goliath.
Desde entonces apenas ha aparecido en dos proyectos, ambos en 2018, con el ir¨®nico par¨¦ntesis de la segunda parte de Bad Santa en 2016. Ocurri¨® sin pena ni gloria. Y ahora su silencio cinematogr¨¢fico est¨¢ a punto de romperse, como un glaciar con explosivos en sus intestinos helados, al regresar en 2024 por la puerta grande en The Electric State, filme que estar¨¢ protagonizado por Millie Bobby Brown y Chris Patt. Lejos quedaron los d¨ªas de aquel Bad Santa que en estas fechas algunos nost¨¢lgicos recuerdan.