Morata y Alice Campello, sobre el nacimiento de Bella: ¡°Vi a ?lvaro como nunca¡±

?lvaro Morata y Alice Campello cumplieron el 9 de enero uno de los sue?os que llevaban mucho tiempo persiguiendo: dar la bienvenida al mundo a una ni?a. La peque?a Bella naci¨® ese d¨ªa para llenar de felicidad a la gran familia que han formado el futbolista del Atl¨¦tico de Madrid y la modelo italiana, pero la experiencia no fue nada sencilla y ambos temieron incluso por la vida de Alice. En una ¨ªntima entrevista para la revista Hola, Campello describe el parto como ¡°el m¨¢s bonito que he tenido¡±, pero lo peor vino despu¨¦s. Desde la calidez del hogar en el que llevan viviendo poco m¨¢s de un mes, la pareja se sincera sobre el episodio m¨¢s duro de su vida.

¡°Cuando ya estaba en la habitaci¨®n, ten¨ªa a la ni?a conmigo y est¨¢bamos con la familia, de repente empec¨¦ a sangrar much¨ªsimo. Recuerdo que, al girarme, vi la cara de ?lvaro superblanca. A partir de ah¨ª no recuerdo nada m¨¢s porque me llevaron a quir¨®fano y estuve all¨ª desde las 9 y media de la ma?ana hasta las 9 y media de la noche, dormida¡±, confiesa la veneciana. ¡°No hab¨ªa dejado de sangrar en ning¨²n momento, tuvieron que hacerme muchas transfusiones y al final me pusieron un globo dentro del ¨²tero¡±. Al d¨ªa siguiente se lo quitaron y por suerte hab¨ªa dejado de sangrar: ¡°Fue solo un gran susto que ocurri¨® porque el ¨²tero no se hab¨ªa contra¨ªdo, lo cual me produjo esa hemorragia tan grande¡±, recuerda.

Alice Campello no se enter¨® de nada porque r¨¢pidamente fue llevada a quir¨®fano y estuvo durmiendo durante horas, de manera que el que m¨¢s angustia vivi¨® fue su marido, ?lvaro Morata. ¡°Entend¨ª la gravedad de la situaci¨®n porque vi a ?lvaro como nunca. Estaba muy mal y ten¨ªa la cara destrozada. Luego se fue porque no pod¨ªa estar en la UCI todo el tiempo, pero me escrib¨ªa mensajes superbonitos. Ah¨ª comprend¨ª su angustia¡±. El futbolista del Atl¨¦tico asegura que vivi¨® una monta?a rusa de emociones durante esas horas en las que incluso se temi¨® lo peor: ¡°Mi vida no tendr¨ªa ning¨²n tipo de sentido si le pasaba algo m¨¢s grave. Ten¨ªa una preocupaci¨®n alucinante¡±. La tranquilidad para el delantero no lleg¨® hasta unas horas despu¨¦s, cuando pudo ver a su esposa acompa?ada de todos sus hijos: ¡°Despu¨¦s vinieron a verla conmigo los ni?os y creo que ese momento ha sido el mejor de mi vida¡±.

El tiempo ha pasado, casi dos meses, pero la modelo y empresaria todav¨ªa no se ha recuperado del todo de un parto que jam¨¢s podr¨¢ olvidar. ¡°No estoy todav¨ªa absolutamente recuperada. El posparto es muy duro, ya con los otros lo fue¡±, detalla para la revista Hola. Para colmo, a pesar de las dificultades que estaba atravesando, tuvo que hacerse fuerte para que ni sus hijos ni Morata ni los miembros de su familia sufrieran todav¨ªa m¨¢s. Y, como no pod¨ªa ser de otra manera, al llegar a casa explot¨® y solt¨® todo lo que hab¨ªa acumulado durante todos los d¨ªas en el hospital: ¡°Durante una semana entera no par¨¦ de llorar. He llorado mucho, much¨ªsimo¡±. Ahora disfruta de su familia de seis, con un Morata que ha querido tatuarse la ¡°lecci¨®n de vida¡± que vivi¨® el pasado 9 de enero y con Alessandro, Leonardo y Edoardo, los tres preciosos hijos que se desviven por su nueva hermanita y a la que, de lo m¨¢s adorables, le dedican sus goles cuando juegan al f¨²tbol.

?Por qu¨¦ Morata y Alice Campello llamaron Bella a su hija?

La pareja decidi¨® llamar a su peque?a Bella, un nombre que se han convertido en tendencia en el mundo del f¨²tbol y que ya han elegido otros jugadores como Cristiano Ronaldo o Marc Cucurella. ?Pero qu¨¦ llevo a Morata y Alice Campello a ponerle este nombre? La propia modelo lo ha explicado en su di¨¢logo con la revista: ¡°Se lo pusimos porque, cuando me qued¨¦ embarazada de los mellizos, nos hab¨ªan dicho que eran ni?o y ni?a y hab¨ªamos pensado en Alessandro y Bella. Es un nombre que nos gustaba much¨ªsimo. Yo hab¨ªa visto una pel¨ªcula que me encant¨®, cuya protagonista se llamaba as¨ª, y se me qued¨® grabado porque me parec¨ªa muy dulce¡±.