La faceta m¨¢s desconocida de Boris Becker en la c¨¢rcel
El tenista alem¨¢n, que est¨¢ cumpliendo pena de prisi¨®n por un delito ec¨®nomico, est¨¢ dando lecciones de estoicismo, filosof¨ªa de la Antigua Grecia, a los otros reclusos.
La vida de Boris Becker (54) sufri¨® un giro radical debido a un fraudulento movimiento econ¨®mico en el que ten¨ªa como objetivo la ocultaci¨®n de sus fondos para no hacer frente a sus deudas por bancarrota. Por ello, la leyenda del tenis fue condenada a dos a?os y medio de prisi¨®n por esta artima?a financiera y en estos momentos, est¨¢ cumpliendo castigo en la c¨¢rcel de HMP Wandsworth, una de las m¨¢s concurridas de todo el archipi¨¦lago.
El alem¨¢n asegura estar ¡°c¨®modo y adaptado¡± en la que ser¨¢ su casa en los pr¨®ximos a?os, seg¨²n describi¨® su abogado Oliver Moser. En este tiempo que lleva entre rejas, Becker ha aprovechado las actividades ofertadas en este complejo penitenciario para reducir su condena mediante bonificaciones que est¨¢n asociadas a su buen comportamiento por diversas causas.
Entre ellas, se encuentran las clases de ciencias del deporte que imparti¨® el tenista alem¨¢n a algunos de sus compa?eros de prisi¨®n, en el cual muchos de ellos desconoc¨ªan alguno de los m¨¦todos para ponerse en forma y tener h¨¢bitos saludables. De hecho, Becker fue una de las personas m¨¢s beneficiadas de esta ense?anza debido a que adelgaz¨® hasta ocho kilos en tan s¨®lo unos meses. ¡°Como atleta, conoce las victorias y las derrotas. ?l comparte su experiencia de vida con sus compa?eros de prisi¨®n¡±, traslad¨® una fuente cercana.
La filosof¨ªa como estilo de vida
Esto no es todo, el jugador m¨¢s joven en ganar Wimbledon sigue vinculado a la docencia y as¨ª lo demuestra con las clases de estoicismo dirigidas a sus alumnos y compa?eros de celda. La nueva materia impartida por el tenista tiene una estrecha relaci¨®n con la esencia de lo que es la filosof¨ªa de la Antigua Grecia que se centra en dar una explicaci¨®n y soluci¨®n a los problemas que dise?a la vida a trav¨¦s de las teor¨ªas de fil¨®sofos consagrados.
¡°Es la persona perfecta para impartir este curso. Es un tipo popular. La gente sabe que ha pasado por muchas cosas¡±, explican fuentes cercanas a los reclusos. Adem¨¢s, los alumnos del extenista alem¨¢n siguen las indicaciones de su maestro a trav¨¦s de una serie de trabajos, donde ponen a prueba todos los conocimientos adquiridos en las clases.