TELEVISI?N
La isla de las tentaciones: Claudia se plantea la ruptura con Javi y ¨¦l irrumpe en Villa Playa
El participante sigui¨® los pasos de Christofer y se fue a buscar a su novia a la otra villa tras ver sus im¨¢genes en la ¨²ltima hoguera.
Noche hist¨®rica la que se vivi¨® el jueves con la ¨²ltima entrega de ¡®La isla de las tentaciones¡¯. Como ya hiciera Christofer en la primera temporada del programa haci¨¦ndose viral al grito de ¡°?Estefan¨ªaaaa¡±, Javi ha corrido por la playa en busca de su novia despu¨¦s de ver en las ¨²ltimas im¨¢genes lo que para ¨¦l aparentemente era un beso en la boca, obviando el hielo por supuesto. El participante no est¨¢ disfrutando en absoluto de la experiencia, se le est¨¢ haciendo ¡°muy cuesta arriba¡± y el ¨²ltimo v¨ªdeo ha terminado por hundirle.
¡°Me quiero ir a mi casa¡±, insist¨ªa el novio de Claudia. En un primer momento abandon¨® la hoguera y tanto sus compa?eros como Sandra Barneda decidieron darle un poco de espacio para digerir el juego que estaba realizando su pareja. Pero tal fue el espacio que, de manera sorprendente, comenz¨® a correr por la playa con un claro objetivo en mente: llegar a Villa Playa y ver a Claudia para abrazarla o quiz¨¢ para pedirle explicaciones por lo que acababa de ver.
A trav¨¦s de la megafon¨ªa anunciaron que todos los habitantes de la villa ten¨ªan que dirigirse a las habitaciones, y es que Javi consigui¨® acceder a ella mientras gritaba el nombre de su novia, aunque todas las participantes estaban ya en sus habitaciones gracias a la r¨¢pida actuaci¨®n de la organizaci¨®n.
Los motivos de la carrera por la playa de Javi
El momento entre Claudia y ?lvaro Boix fue lo que hizo explotar todo en la cabeza de Javi, pero las im¨¢genes que hab¨ªa visto hasta ese instante reflejaban lo agobiada que estaba su novia por el reality que estaba haciendo ¨¦l. ¡°Necesitaba separarme e ¨¦l. No se est¨¢ abriendo, no est¨¢ conociendo a las chicas, est¨¢ como un mueble m¨¢s. Me agota la situaci¨®n, me va a perder¡±, aseguraba Claudia en las im¨¢genes que Javi pudo ver en la temida tablet.
?l, no obstante, hac¨ªa autocr¨ªtica y anunciaba cambios: ¡°Me est¨¢ reclamando que me integre mucho m¨¢s. Voy a intentar ser menos mueble, implicarme m¨¢s en la casa, hacer m¨¢s cosas¡±, comentaba. Pero hab¨ªa m¨¢s im¨¢genes para ¨¦l. La tablet mostraba entonces la sinton¨ªa de Claudia y ?lvaro, sus juegos pas¨¢ndose un hielo por diferentes partes de sus cuerpos, los sensuales bailes, y el beso. ¡°?Es en la boca?¡±, preguntaba Javi de manera insistente. ¡°No s¨¦ si es con un hielo o qu¨¦, pero es en la boca¡±, acertaba a decirle Mario con un tacto discutible. ¡°Yo quiero verla, despu¨¦s de esta imagen necesito ver a mi novia y que me lo explique, no la reconozco¡±, declaraba Javi haciendo caso omiso a las palabras de Barneda con las que trataba de tranquilizarle.
Claudia se plantea dejar a Javi
La joven est¨¢ deseando ver a otro Javi en Villa Para¨ªso, un Javi integrado, divertido, un Javi que disfrute de la experiencia de participar en ¡®La isla de las tentaciones¡¯. Sin embargo, hoguera tras hoguera ve que su novio est¨¢ apartado, deca¨ªdo y con mucho miedo, detalles que han provocado que Claudia se derrumbe. ¡°No entiendo. Yo me agobio porque no entiendo qui¨¦n es esta persona. Este no es el Javi del que yo me enamor¨¦. Siento que le estoy apagando y a m¨ª me duele mucho¡±.
Con sus palabras evidencia un sentimiento de culpa porque siente que le est¨¢ apagando, que su actitud ha cambiado desde que est¨¢n juntos: ¡°Yo le he dado mil opciones: vamos a vivir cada uno por su lado, vamos a vernos menos... Y esta era una de las opciones, pero no veo que lo est¨¦ intentando¡±, explic¨®. ¡°Me duele tanto verle as¨ª... En parte me siento superculpable porque es desde que est¨¢ conmigo. Igual tengo que dejarle para que est¨¦ bien (...). Yo en parte me siento un poco mal porque estoy intentando disfrutar, que hace mucho tiempo que no lo hago (...). Me tiene idealizada. Pero soy una persona normal, simplemente le he dado el cari?o que no le han dado y le he tratado como nunca le han tratado¡±.