La canci¨®n ¡®El jefe¡¯ se le vuelve en contra a Shakira: sus empleados se rebelan

Shakira sigue rompiendo moldes con su m¨²sica, especialmente tras su ruptura con Gerard Piqu¨¦, despu¨¦s de la que se ha dedicado a plasmar su dolor y su despecho en sus canciones, contra el excentral del Barcelona y tambi¨¦n hacia sus antiguos suegros: Joan Piqu¨¦ y Montserrat Bernab¨¦u.

Precisamente uno de los detalles de su ¨²ltimo tema iba dedicado al padre de su expareja, de quien dec¨ªa que no pisa sepultura. Todo enmarcado dentro una especie de corrido mexicano al alim¨®n con el grupo Fuerza Regida de un claro car¨¢cter social, de reivindicaci¨®n laboral. De ah¨ª su nombre: ¡®El jefe¡¯.

Pero parece que la letra de la canci¨®n se le ha vuelto en contra a la colombiana. Si bien aparece, tanto en esta como en el videoclip, Lily Melgar, la ni?era de sus hijos a la que Piqu¨¦ no le habr¨ªa pagado la indemnizaci¨®n tras poner a la de Barranquilla sobre la pista de sus deslealtades, otros de los empleados no tendr¨ªan la misma buena relaci¨®n con la cantante.

Los testimonios

As¨ª, una de las bailarinas de la artista ha hablado en el canal de YouTube La Saga y la ha acusado de dejarle a deber dinero: ¡°Hice 12 fechas y no me pag¨®, y te voy a decir algo, hubiera trabajado con ella sin goce de pago, pero la manera en la cual nos trat¨® a las bailarinas¡­ He trabajado con gente muy exitosa, artistas reconocidos, y eran agradecidos. Ella nos volteaba la cara, jam¨¢s nos dio las ¡®gracias¡¯ por nada. Nos rega?aba mucho y nos sacaba del escenario porque no quer¨ªa que apareci¨¦ramos con ella en las pantallas grandes¡±, ha dicho Jenny Garc¨ªa, quien form¨® parte del cuerpo de baile de la colombiana.

¡°En los descansos, les dec¨ªa a los de seguridad: ¡®?Qu¨¦ hacen aqu¨ª las bailarinas? Qu¨ªtamelas de ah¨ª, no, no, no¡­¡±. Una experiencia que le hizo perder ¡°el respeto por ella¡±.

Es m¨¢s, se queja de que la cantante las habr¨ªa echado de su camerino porque necesitaba ir al ba?o: ¡°Mi amiga estaba en tanga y yo tap¨¢ndome mis chichis [pechos] con las manos. Nos echaron al pasillo. Pasaban los de seguridad, pasaban los de la prensa, pasaba todo mundo y yo volteaba al verlos muy inc¨®moda. Les ped¨ª a los de seguridad que nos dejaran pasar a vestirnos y nos dijo ¡®No, que la se?ora se molesta¡¯¡±.

M¨¢s quejas

El periodista Javier Ceriani contaba tambi¨¦n esta semana en Espejo P¨²blico c¨®mo el trato que la cantante dispensaba a otros empleados, como una de sus trabajadoras del hogar, pareja de su ch¨®fer. ¡°Ellos se quejan de que para Shakira no hab¨ªa fin para el trabajo. Eran diecisiete horas, cocinar para much¨ªsima gente¡­ Un domingo hab¨ªan cocinado para diecisiete personas y ella [Shakira] quer¨ªa que se calentase un pollo a las 2 de la ma?ana y le dijo: ¡®No puedo m¨¢s, no voy a hacerte el pollo¡¯. Ella, autom¨¢ticamente, los ech¨® a las 6:30 horas y los dej¨® en la calle¡±.

¡°Para poder hacer esta canci¨®n, la de ¡®El jefe¡¯, Shakira tuvo que pagarle a toda la gente que tuvo en toda su vida como empleados, incluida esta mujer, Lily, le pag¨® casi hasta un mill¨®n de d¨®lares. Tuvo que pagar todas las deudas para poder acusar, ahora s¨ª, a Piqu¨¦, de ser el taca?o¡±, apuntaba Ceriani.

¡°Hubo una excoordinadora de talentos que armaba los videoclips de Shakira que dec¨ªa que no se le pod¨ªa mirar a los ojos en determinados momentos, que no quer¨ªa otras chicas lindas o parecidas a ella en los v¨ªdeos. Con la casa lo que pasaba es que no ten¨ªa fin, los empleados viv¨ªan en esa casa, no ten¨ªan seguro m¨¦dico, no ten¨ªan estatus legal. Ten¨ªan que ser, no digo esclavos, pero era o regresar a Colombia o trabajar a merced de ella, que es cocinar en cualquier momento, atender a todos los que ven¨ªan a trabajar¡­¡±, agregaba.