La ca¨ªda en desgracia de Joe Rogan: el nuevo enemigo p¨²blico n¨²mero uno
El presentador estadounidense, una celebridad gracias su podcast, no levanta cabeza desde que Neil Young le se?alara por difundir informaci¨®n falsa sobre la COVID-19.
En las ¨²ltimas semanas la fama de Joe Rogan (54) ha trascendido las fronteras de EEUU. Y no precisamente por una buena causa. La amenaza, consumada, de Neil Young de retirar su cat¨¢logo musical de Spotify si la plataforma de streaming segu¨ªa ofreciendo cobijo a Jose Rogan y su podcast de tintes negacionistas, fue el primer cap¨ªtulo de la ca¨ªda en desgracia del presentador norteamericano.
Hasta que el legendario m¨²sico no dio un golpe encima de la mesa, el presentador de ¡®The Joe Rogan Experience¡¯ campaba a sus anchas sustentado por un contrato muy lucrativo - 100 millones de d¨®lares- con Spotify y una legi¨®n de seguidores que le hab¨ªan aupado al primer puesto de los podcast m¨¢s escuchados de 2021. Todo parec¨ªa irle a las mil maravillas a Rogan. Pero ahora mismo est¨¢ viviendo una aut¨¦ntica pesadilla.
Rogan, famoso por ser un humorista, protagonista de series televisivas, presentador del reality show ¡®Fear Factor¡¯ o comentarista de combates de la UFC, parec¨ªa haber salido indemne tras la huida de Neil Young a Spotify, pero a la leyenda del folk-rock se le han unido otros artistas como la cantante Jani Mitchell y, en un nuevo giro de los acontecimientos, otra artista, India.Arie, adem¨¢s de retirar tambi¨¦n su m¨²sica ha denunciado el leguaje irrespetuoso, de tintes racistas, de Rogan. Sobre todo por el uso de la palabra ¡®nigger¡¯. La gota que ha colmado el vaso.
El propio Rogan ha tenido que salir al paso de los comentarios negando que sea racista y que hay que tener en cuenta el ¡°contexto¡± de sus declaraciones, aunque es consciente de que ahora mismo est¨¢ entre la espada y la pared. ¡°Nunca he usado la palabra como un gesto racista porque no soy racista, pero cada vez que est¨¢s en una situaci¨®n en la que tienes que decir ¡®No soy racista¡¯, est¨¢s jodido, y yo claramente lo estoy¡±, asegura el presentador.
Y no le falta raz¨®n. Sus programas ya han causado cr¨ªticas y deserciones de Spotify por difundir informaci¨®n err¨®nea sobre la COVID, causando tambi¨¦n un perjuicio econ¨®mico a la plataforma, pero si adem¨¢s se suma a la ecuaci¨®n la m¨¢s minima duda sobre comentarios de tinte racista en el pa¨ªs del Black Lives Matter, la situaci¨®n empeora.
Despu¨¦s de prometer que tratar¨ªa de ¡°equilibrar mejor las opiniones controvertidas¡± en su programa tras el anuncio de Spotify de agregar enlaces en los podcasts sobre la COVID-19 a informaci¨®n veraz con base cient¨ªfica, la nueva pol¨¦mica amenaza con llev¨¢rselo por delante.
Y es que en las ¨²ltimas horas Spotify ha eliminado m¨¢s de 100 programas del presentador, aunque no est¨¢ claro si se debe a contenidos relacionados con la pandemia o a contenidos que se refieren a su lenguaje inapropiado. O a ambos.
Desde luego, las charlas de Rogan con sus invitados, a menudo con un vaso de whisky en la mano, sobre temas de lo m¨¢s variopinto, que incluyen ovnis, drogas psicod¨¦licas, carne roja o fitness, deslizando palabrotas por aqu¨ª o por all¨¢, como durante una conversaci¨®n entre amigos, no pueden considerarse de lo m¨¢s apropiadas.
Y el caso es que personalidades provenientes de todos los ¨¢mbitos se han agolpado frente a su micr¨®fono. En 12 a?os, ha recibido a cerca de mil invitados -el 88% hombres, seg¨²n el sitio JRELibrary-, entre ellos el fundador de Tesla, Elon Musk, que se fum¨® un porro en el plat¨®; Edward Snowden, el ex analista de la NSA que divulg¨® documentos secretos sobre programas de espionaje de Estados Unidos; o el cineasta Oliver Stone. Pero parece que cualquier tiempo pasado fue mejor. Y puede que lo pero est¨¦ todav¨ªa por llegar.