Jos¨¦ Aguilar, bi¨®grafo de Marisol: ¡°Dif¨ªcilmente se recompondr¨¢¡±
¡°Siento mucho que est¨¦ pasando por uno de los peores momentos de su vida tras el fallecimiento de Massimo, porque era el hombre de su vida¡±, dice.
Cuando tiene lugar uno de los momentos m¨¢s importantes para el cine espa?ol, como ha sido la celebraci¨®n este fin de semana de la gala de los premios Goya, que tuvo lugar en Valladolid y fue presentada por Ana Bel¨¦n y Los Javis, siempre viene a la memoria una de las grandes actrices del panorama patrio que decidi¨® retirarse antes de tiempo: Marisol.
Josefa Flores Gonz¨¢lez, a la saz¨®n, la ni?a prodigio Marisol, natural de M¨¢laga, vive retirada desde 1985, cuando puso punto final a su carrera como actriz y cantante despu¨¦s de tantos ¨¦xitos, especialmente en la d¨¦cada de los sesenta.
¡®Estando contigo¡¯, ¡®Coraz¨®n contento¡¯ o ¡®Un rayo de luz¡¯ forman ya parte de la memoria espa?ola y alegran a quien las recuerda, aunque ella no est¨¢ pasando por una situaci¨®n precisamente feliz, tal como cuenta su bi¨®grafo, Jos¨¦ Aguilar, en una entrevista con El Espa?ol.
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El exdeportista y exconvicto se encuentra recibiendo tratamiento de quimioterapia en un centro hospitalario de Las Vegas.
La empresa que estar¨ªa ayud¨¢ndole con su imagen habr¨ªa roto la vinculaci¨®n ¨¦l cuando dej¨® al bufete de abogados de Crist¨®bal Martell.
¡°En primer lugar, siento mucho que est¨¦ pasando por uno de los peores momentos de su vida tras el fallecimiento de Massimo, porque era el hombre de su vida. Eran el uno para el otro. Ha sido un hachazo brutal para su existencia y dif¨ªcilmente se recompondr¨¢. Me consta que est¨¢ pasando momentos muy duros y pr¨¢cticamente no sale a la calle¡±, ha revelado Aguilar.
Un fen¨®meno planetario
Aunque son muchos los que asocian la figura de Marisol al cine espa?ol, la realidad es que se trat¨® de un fen¨®meno a nivel mundial, tal como reconoce Aguilar: ¡°As¨ª es. Nos centramos en Espa?a y Latinoam¨¦rica, pero es que fue una gran estrella en la mayor¨ªa de pa¨ªses africanos como Costa de Marfil, Congo, Camer¨²n, Marruecos y en Jap¨®n la veneraban de tal manera que cuando iba por la calle le quer¨ªan comprar lo que llevaba puesto, chaquetas, horquillas, faldas, zapatos¡¡±.
¡°Fue una gran conmoci¨®n social. Hizo anuncios de chocolates, desfiles de moda y grab¨® con las mejores orquestas en japon¨¦s. A¨²n recuerdo c¨®mo suena en ese idioma la canci¨®n ¡®Me conformo¡¯. En Europa la adoraron en Holanda, B¨¦lgica, Alemania o Italia¡±, agrega.
Una vida de ¨¦xitos que la apart¨® un poco de la realidad propia de una ni?a: ¡°Conmigo fue clara y rotunda al afirmar que viv¨ªa al margen de la calle porque ten¨ªa una vida llena de compromisos. Ech¨® de menos jugar en la calle, estar con sus amigas¡ En definitiva, tener una vida normal. Me contaba que afortunadamente Carlos J. Goyanes no vendi¨® su contrato a Hollywood¡±, se?ala.