Harry y Meghan se olvidan de su desalojo en un club de 4.000 d¨®lares
Los duques de Sussex fueron vistos cenando en el exclusivo San Vicente Bungalows despu¨¦s de conocerse que Carlos III los desahuciaba de Frogmore Cottage.

Las penas con pan son menos penas. O eso al menos es lo que han debido de pensar el pr¨ªncipe Enrique de Inglaterra y su esposa, la otrora actriz Meghan Markle, despu¨¦s de que saliese a la luz que su padre y suegro, respectivamente, el rey Carlos III, ha decidido despojarlos de su ¨²nica residencia en el Reino Unido, Frogmore Cottage.
Y es que la pareja ha sido vista cenando en el exclusivo club nocturno San Vicente Bungalows en Los ?ngeles, como recoge el Daily Mail, cuya membres¨ªa cuesta nada m¨¢s y nada menos que unos 4.000 d¨®lares anuales.
Todo esto despu¨¦s de confirmar con un escueto comunicado a trav¨¦s del portavoz de su fundaci¨®n Archewell que las informaciones acerca de que deb¨ªan abandonar el que era su domicilio en Windsor eran ciertas.
Lista de espera de 7.000 personas
Para entrar en este club al que han ido a llorar sus penas no solo basta con tener una gran cuenta corriente, ya que, adem¨¢s, hay una lista de espera de unas siete mil personas para poder formar parte que cuyo perfil eval¨²a una comisi¨®n de doce expertos.
Este club de Hollywood, con caba?as de lujo, cuenta con clientes tan famosos como Jennifer Lopez o Jennifer Aniston, entre otros. Aqu¨ª no se pueden tomar fotos para respetar la privacidad de los miembros y es obligatorio poner una pegatina a la c¨¢mara del tel¨¦fono. Una regla que, en caso de romperse, conllevar¨ªa la expulsi¨®n. Asimismo, tampoco se puede comentar nada de lo visto o escuchado all¨ª.
Una casa para el pr¨ªncipe Andr¨¦s
La otrora casa de los Sussex tendr¨¢ ahora, con casi toda probabilidad, ya que ¨¦l no est¨¢ muy convencido, un nuevo inquilino: el pr¨ªncipe Andr¨¦s, el hijo favorito de la fallecida Isabell II. Al parecer, Carlos III quiere modernizar la monarqu¨ªa y tambi¨¦n reducirla, lo que pasa por retirarle la asignaci¨®n de casi 300.000 libras a su hermano peque?o.
No obstante, el rey le habr¨ªa prometido no dejarlo en la calle, por lo que le habr¨ªa buscado una nueva residencia al duque de York, y esta casa ser¨ªa la que tendr¨ªa en mente para su hermano. Una casa que fue un ¡°regalo¡± para los Sussex por su boda. Pero un regalo entendido como una cesi¨®n de uso, ya que nunca fue puesta a su nombre, de ah¨ª que ahora puedan retir¨¢rsela para el uso del pr¨ªncipe Andr¨¦s.
Una vivienda que cuenta con todo tipo de comodidades, desde diez habitaciones hasta un estudio, invernadero e incluso una pista de tenis. Asimismo, est¨¢ al abrigo del campo, con la protecci¨®n propia de la naturaleza, para que all¨ª puedan mantener a salvo su intimidad, algo que los Sussex valoraban, ya que sent¨ªan que all¨ª ten¨ªan el control de su privacidad.