El nuevo privilegio de Boris Becker en prisi¨®n: ¡°Hay mucho resentimiento¡±

No hay nada como ser parte importante de la historia del tenis para estar sometido al escrutinio p¨²blico. M¨¢s, cuando adem¨¢s se da la circunstancia de una serie de malas decisiones han supuesto tu ingreso en prisi¨®n. Boris Becker (54), ganador de seis torneos de Gran Slam, fue hallado culpable a finales de abril de poner fondos fuera del alcance de los acreedores de forma ¡°deliberada y deshonesta¡± para no hacer frente a sus deudas tras declararse en bancarrota en 2017.

Una jugada que en un primer momento le procur¨® una nada reconfortante estancia en la prisi¨®n de Wandsworth, famosa por sus duras condiciones. No obstante, al poco tiempo de ingresar a principios de mayo, el alem¨¢n fue reubicado en un ala m¨¢s ¡°amigable¡± de la prisi¨®n y, finalmente, fue trasladado a otra destinada a criminales extranjeros, la de Huntercombe. Un hecho que podr¨ªa indicar que su deportaci¨®n es una opci¨®n que est¨¢ encima de la mesa.

No obstante, a pesar de estar entre rejas, las condiciones del extenista han mejorado paulatinamente en apenas un mes y la reciente consecuci¨®n de un ¡°c¨®modo¡± trabajo en la nueva instituci¨®n penitenciaria donde presumiblemente cumplir¨¢ el resto de su condena, ha levantado ampollas entre los reclusos y sus familias.

Y es que el alem¨¢n, seg¨²n revela The Sun, ha sido nombrado asistente de clase. Pero su r¨¢pido ascenso al codiciado puesto ha hecho que las familias de otros presos escriban cartas de protesta al gobernador de la c¨¢rcel.

¡°Normalmente se tarda a?os antes de conseguir un trabajo como asistente de aula, ya que se considera un privilegio. Pero a Becker le han dado el trabajo a las pocas semanas de ser condenado. Hay mucho resentimiento al respecto y las familias de algunos presos han escrito cartas de queja¡±, asegura una fuente consultada por el tabloide brit¨¢nico.

Becker ense?a teor¨ªa de la educaci¨®n f¨ªsica y los beneficios del ejercicio y la dieta a los reclusos en un aula de la c¨¢rcel, que tiene una alta proporci¨®n de presos extranjeros. Sin embargo, no trabaja en el gimnasio de la c¨¢rcel ya que no tiene todav¨ªa el estatus de preso mejorado porque no ha cumplido el tiempo suficiente entre rejas.

¡°No es exactamente la vida de lujo a la que est¨¢ acostumbrado, pero est¨¢ mejor que la mayor¨ªa de los reclusos¡±, indica la misma fuente, aunque desde Servicios Penitenciarios se afirma que es ¡°falso¡± que haya habido un trato de favor.

Em cualquier caso, como dec¨ªamos, Becker se enfrenta a la deportaci¨®n autom¨¢tica al final de su condena. No obstante, tiene la esperanza de ser repatriado a su Alemania natal a m¨¢s tardar en noviembre, en virtud del Plan de Expulsi¨®n Anticipada del Gobierno. Becker cree que entonces ser¨¢ puesto en libertad antes de Navidad porque el sistema penal alem¨¢n es m¨¢s suave.