?De qu¨¦ color deber¨ªas decorar el ¨¢rbol de Navidad? As¨ª debes hacerlo seg¨²n su origen
El ¨¢rbol de Navidad es uno de los elementos m¨¢s relevantes de este per¨ªodo del a?o. Cuenta con una serie de colores de lo m¨¢s caracter¨ªsticos.
La Navidad es una fiesta en la que las tradiciones y costumbres juegan un papel fundamental. Hay que tener en cuenta muchos elementos, y uno de los m¨¢s relevantes es el ¨¢rbol. Este es uno de los m¨¢s populares, especialmente a la hora de colocarlo en domicilios de todos los rincones del planeta. Miles de familias se congregan para elaborarlo y volver a ponerlo cada a?o.
A pesar de que esta es una costumbre de lo m¨¢s arraigada en esta sociedad, pocos conocen su origen. En este caso, hay que remontarse a los albores de la historia, pero se debe tener en cuenta que existen varias versiones sobre el nacimiento del conocido como ¨¢rbol de Navidad.
Alemania, el posible origen de la tradici¨®n
Para conocer el origen del ¨¢rbol de Navidad, hay que remontarse al siglo VIII, en Alemania. El pa¨ªs del centro de Europa es el lugar donde se origin¨® la tradici¨®n de este elemento, uno de los pilares de esta ¨¦poca del a?o, una de las m¨¢s esperadas por todos. Aqu¨ª hay que destacar la figura de un evangelizador procedente de Inglaterra, san Bonifacio.
En este caso, hay varias historias sobre el nacimiento de esta costumbre, pero todas en torno a esta figura. Una de ellas narra que, tras discutir con unos druidas, tom¨® la decisi¨®n de cortar un fresno que era perenne. Este era conocido con el nombre de ¡®Yggdrasil¡¯ (¡®¨¢rbol de la vida¡¯ en castellano). En su lugar, san Bonifacio coloc¨® en el lugar de este un pino. Esta ser¨ªa la primera versi¨®n.
Otra trata de que san Bonifacio fue algo m¨¢s expeditivo. Esta leyenda narra que el evangelizador cort¨® un roble. De paso, elimin¨® a todos los que hab¨ªa a su alrededor. De este proceso solo hubo un superviviente: un abeto. Este comenz¨® a ser venerado y fue considerado como el ¨¢rbol del ni?o Jes¨²s. De esta forma, comenz¨® una tradici¨®n que ha llegado a nuestros d¨ªas. En Espa?a, empez¨® a llevarse a cabo en el siglo XIX.
Estonia, otro posible origen
Por otra parte, cabe destacar que hay una versi¨®n distinta a las anteriores y que sit¨²a el origen del ¨¢rbol de Navidad en Estonia. La ciudad, Tall¨ªn, y la fecha, en 1441. La historia cuenta que un comerciante sin compromiso empez¨® a danzar en torno a un ¨¢rbol que hab¨ªa en la plaza principal de este municipio, uno de los m¨¢s importantes del pa¨ªs del Viejo Continente.
En este momento, lo hizo junto con varias mujeres, con la mala fortuna de que el ¨¢rbol se termin¨® quemando. Esto hizo que la costumbre de iluminar abetos por Navidad tuviera una popularidad creciente en los a?os venideros, siendo este otro de los posibles nacimientos de la tradici¨®n, una de las m¨¢s populares que han pervivido hasta la actualidad.
Un elemento relevante, la decoraci¨®n con los colores
Uno de los elementos m¨¢s relevantes que est¨¢n relacionados con el ¨¢rbol de Navidad tienen que ver con los colores que este porta. Hay una serie de conceptos muy marcados por las gamas crom¨¢ticas, y especialmente, por el significado que estos llevan.
Un ¨¢rbol est¨¢ compuesto, adem¨¢s de por los colores, por una serie de elementos como pueden ser las luces, adornos y otro tipo de piezas decorativas. En el caso que nos ocupa, el de las gamas crom¨¢ticas y su significado, estos son los m¨¢s relevantes en el caso de una de las tradiciones sobre las que se sustenta la Navidad:
- El rojo: simboliza el fuego y la sangre. Por otra parte, tiene la funci¨®n de representar el amor y la generosidad.
- El verde: el color de la esperanza, tambi¨¦n cuenta con una doble funci¨®n, ya que hace referencia a la vida y la naturaleza, dos aspectos de lo m¨¢s importantes.
- El blanco: en este caso lo que se simboliza es la pureza, alegr¨ªa y la fe.
- El dorado: por su parte, esta gama crom¨¢tica cuenta con la funci¨®n de simbolizar la riqueza y la prosperidad.
- El plateado: en su caso, la riqueza se encuentra presente, pero tambi¨¦n est¨¢ acompa?ado por otros elementos o sentimientos, como pueden ser la inocencia o la transparencia, dos cualidades muy valoradas en esta sociedad.