SUCESOS
Cadena perpetua para el futbolista italiano Giovanni Padovani por el cruel asesinato de su expareja
El asesino termin車 con la vida de su exnovia golpe芍ndola con un bate de beisbol, un martillo y un banco cuando militaba en el Sancataldese de la Serie D.
El mundo del f迆tbol, as赤 como la sociedad italiana, reviven estos d赤as la conmoci車n que hace tiempo instal車 en el pa赤s la macabra noticia de un inhumano asesinato. Se trata del crimen protagonizado por Giovanni Padovani, exfutbolista que en la fecha de los hechos militaba en el Sancataldese de la Serie D, cuya sentencia ya ha sido emitida por el Tribunal de causas penales de Bolonia: cadena perpetua para Padovani por el asesinato de su exnovia, Alessandra Matteuzzi. ?l ten赤a entonces 28 a?os; ella 56.
Sobre la cabeza del asesino, seg迆n ped赤a la Fiscal赤a, las acusaciones de homicidio agravado con premeditaci車n, acoso, motivos fr赤volos y v赤nculo afectivo. Tan solo dos horas de juicio hicieron falta para que el magistrado encargado de llevar el caso, Domenico Pasquariello, tomase su decisi車n, fallo judicial que se complementa con una indemnizaci車n de 115.000 euros que el asesino deber芍 pagar a la familia de la v赤ctima.
Reconstrucci車n del crimen
Los hechos por los que se ha juzgado a Padovani carecen de humanidad. Matteuzzi lleg車 a su casa mientras hablaba por tel谷fono con su hermana Stefania cuando fue sorprendida por el italiano. Fue entonces cuando se escucharon varios gritos, lo que provoc車 la locura de la hermana de la asesinada, que implor車 desde el otro lado de la l赤nea: ※?No Giovanni, no por favor, ayuda!§.
Pero ya era tarde. Padovani mat車 a su expareja de forma sangrante, cruenta y bestial: adem芍s de patadas y pu?etazos, le propin車 martillazos, golpes con un bate de beisbol y, luego, agarr車 un banco de un jard赤n que hab赤a cerca del lugar donde cometi車 el crimen para asestar otros tantos impactos.
Al contemplar lo que se estaba produciendo, unos vecinos trataron de detener el asesinato. Fue entonces cuando Padovani vocifer車: ※?No me importa ir a la prisi車n, pero tengo que matarla!§. Fueron veinte minutos los que tard車 en acabar con su vida. Cuando la polic赤a lleg車, alertada por Stefania, Padovani aguardaba; fr赤amente recibi車 a las autoridades: ※Me alegro de que hayan llegado§.
La mujer denunci車 tres semanas antes
Este vil suceso se produjo tras un a?o en el que la relaci車n entre ambos hab赤a contemplado subidas y bajadas, am谷n del comportamiento obsesivo y persecutorio del exfutbolista: robo de contrase?as en redes sociales, mensajes constantes para hacer videollamada y cerciorarse de que no estaba con otro, c芍maras de videovigilancia para tenerla controlada. Tres semanas antes de su muerte, Matteuzzi hab赤a denunciado el acoso sin que se llegasen a tomar medidas cautelares contra el hombre.
Desde la sala en la que le han juzgado, Padovani se ha mostrado conocedor de lo que hizo y de las consecuencias correspondientes. ※Ya no soy aquel hombre, entonces no giraba redondo. Pero si cre谷is que es normal matar a una mujer tan bella e inteligente como Alessandra, entonces merezco una cadena perpetua§, ha expresado, con el mismo tono fr赤o que le caracteriza.
※Si reconoces una perturbaci車n en lo que he hecho y en lo que todav赤a tengo, lo consider芍is todo sin dejaros influenciar por la opini車n p迆blica. Lo que he hecho es muy grave e imperdonable§, ha completado el asesino. Tras la sentencia, el abogado de la familia de la v赤ctima ha valorado la situaci車n como la moneda de doble cara que es siempre el juicio por la muerte de un ser querido: ※Se ha producido una tragedia. La cadena perpetua puede dar satisfacci車n porque se ha hecho justicia, pero nunca te deja feliz, nunca§.