Kyrgios pierde una ocasi¨®n de oro por su mala cabeza

Kyrgios naci¨® Kyrgios y, si no cambia de verdad, morir¨¢ Kyrgios. El australiano tir¨® dos raquetas (sin recibir ni un aviso) y dos sets antes de perder en cinco (7-5, 4-6, 7-5, 6-7 (3) y 6-4 en 3h39) contra Karen Khachanov, que se limit¨® a hacer las cosas bien y dejar que el d¨ªscolo Nick se hiciera ¨¦l solito el harakiri. El mejor jugador desde que empez¨® la gira de hierba el 6 de junio, con 26 victorias, la final de Wimbledon (cay¨® ante Novak Djokovic), el t¨ªtulo en Washington y dos triunfos frente al n¨²mero uno, Daniil Medvedev (Montreal y Nueva York), desperdici¨® una oportunidad de oro para tener ¨¦xito en el US Open, por su mala cabeza.

Todo el esfuerzo mental realizado para entrar en una disciplina de entrenamientos, dieta y descanso, se fue por la borda en cuanto el f¨ªsico y las circunstancias del partido no le favorecieron. Una pena, porque estaba jugando realmente bien y con buena actitud, a pesar de sus excentricidades, que continu¨® practicando. Al final del partido pag¨® su frustraci¨®n con un objeto que maltrata a menudo, su raqueta. Destroz¨® dos, ahora s¨ª, sin piedad. Otra vez un mal ejemplo, del que deber¨ªa arrepentirse.

Khachanov est¨¢ en las ant¨ªpodas del aussie. Tiene una vida ordenada y una ¨¦tica de trabajo mejorada con el paso de los a?os. Casado, con un hijo, graduado en Educaci¨®n F¨ªsica y seguidor del Real Madrid, le llega con 26 a?os y como n¨²mero 31 del mundo (fue octavo en 2019) el mayor ¨¦xito de su carrera: jugar por primera vez las semifinales de un Grand Slam. Se enfrentar¨¢ el viernes al noruego Casper Ruud, que barri¨® a Berrettini. Sus mejores resultados hasta este martes en majors eran los cuartos de final en Roland Garros 2019 y Wimbledon 2021. Contra Kyrgios luch¨® con fuego contra el fuego al colocar 30 aces por los 31 de su rival. Adem¨¢s, jug¨® con mucha m¨¢s tranquilidad, por eso cometi¨® casi la mitad de errores no forzados (31) que el de Camberra (58).

Monta?a rusa

Kyrgios, con aparentes problemas en la pierna (¡±No puedo andar¡±, le dijo a su equipo entre el primer y el segundo set), se reh¨ªzo para igualar el partido, pero perdi¨® los papeles en la tercera manga cuando se le escap¨® un punto de break con 4-4. Lanz¨® la raqueta plana contra el suelo y en el siguiente juego no dio pie con bola, con una indolencia evidente. Parec¨ªa ido del partido, pero pele¨® para mantenerse en el cuarto parcial ante un oponente con el que hab¨ªa tenido una discusi¨®n intelectual en el pasado a trav¨¦s de las redes sociales. Si lo hubiera hecho al principio, otro gallo le hubiera cantado. En el quinto, Khachanov rompi¨® de salida para ponerse con 2-0 y aguant¨® con bravura la ventaja hasta el final. Durante el partido, salv¨® siete puntos de break, con el p¨²blico, m¨¢s proclive al esp¨¦ctaculo que al tenis en s¨ª, claramente en su contra.

Al final le mand¨® un recadito a los espectadores: ¡°Ahora me est¨¢is dando algo de cari?o, gracias, os lo agradezco (se escuch¨® alg¨²n abucheo y ¨¦l aplaudi¨® a la grada). Estoy muy orgulloso de m¨ª mismo, he peleado de principio a fin, y he logrado la victoria¡±. Ahora le espera Ruud: ¡°Me gustar¨ªa ganarlo, cuanto m¨¢s lejos llegas, m¨¢s suben las expectativas. Son mis primeras semifinales de Grand Slam y no tengo nada que perder, tengo que estar preparado¡±. El futuro inmediato de Kyrgios es una inc¨®gnita. ¡°Al lado de los Grand Slams, los otros torneos son una p¨¦rdida de tiempo. Me siento como una mierda. Lo que ha ocurrido es desgarrador, devastador, no solo para m¨ª, sino para todos los que quer¨ªan verme ganar¡±, dijo en rueda de prensa, demostrando que, al menos, el tenis le importa. No hay que perder la esperanza en ¨¦l.