Kyrgios fulmina a Medvedev
El australiano, sensacional, destrona al ruso, que era vigente campe¨®n y pierde el n¨²mero uno, por el que pelear¨¢n Nadal, Alcaraz y Ruud.
Nadie discut¨ªa la calidad de Nick Kyrgios, ni siquiera cuando su ¨¦tica de trabajo y su comportamiento dentro y fuera de la pista eran reprobables. Ahora, adem¨¢s, se ha centrado y mantiene una disciplina que le convierte en un jugador casi imparable. Despu¨¦s de saltarse la temporada de tierra, el australiano adquiri¨® nuevos h¨¢bitos y desde el 6 de junio, cuando arranc¨® la campa?a de hierba, es el jugador con m¨¢s victorias, 26, del circuito. Este domingo, en octavos del US Open, le asest¨® un doble golpe a Daniil Medvedev, que ya no podr¨¢ defender su t¨ªtulo de campe¨®n ni mantener el n¨²mero uno: 7-6 (11), 3-6, 6-3 y 6-2 en 2:53. El martes se enfrentar¨¢ a otro ruso, Karen Khachanov, y sigue en el torneo de dobles, junto con su paisano y colega Thanasi Kokkinakis.
Kyrgios, finalista en Wimbledon, aspira a suceder a Medvedev en el palmar¨¦s, y Nadal, Alcaraz y Ruud, que tambi¨¦n contin¨²an en competici¨®n, el noruego ya en cuartos, pelear¨¢n por liderar el ranking el 12 de septiembre, con m¨¢s opciones para el balear.
Lo de Kyrgios, a sus 27 a?os, no es flor de un d¨ªa. Parece que ha decidido por fin establecerse en la ¨¦lite. Y lo demostr¨® con un correctivo serio a Medvedev, campe¨®n en 2021, semifinalista en 2020 y finalista en 2019. El aussie empeque?eci¨® al ruso, desbordado por los ca?onazos y por la calidad del d¨ªscolo Nicholas Hilmy, que no abandona sus excentricidades pese a su reforma integral. En el tercer set protagoniz¨® la jaimitada del torneo, cuando remat¨® innecesariamente, por gusto, una bola que no entraba, pasando al campo contrario, un movimiento no permitido en el tenis. ¡°Pensaba que se pod¨ªa hacer¡±, le dijo al juez de silla, pero no. Era un punto importante, con 1-1 y 30-30 en la tercera manga. Afortunadamente, no le penaliz¨®. Factur¨® un partidazo con 53 golpes ganadores y 38 errores no forzados, y un 71% de primeros. Es la cuarta vez que gana a Medvedev (la anterior hace unas semanas en Montreal), segunda siendo el moscovita n¨²mero uno, como lo era Nadal cuando pudo con ¨¦l en Wimbledon 2014. Tiene el balance favorable con Daniil (4-1), Zverev (4-3) y Tsitsipas (4-1) y ha podido tres veces con el manacor¨ª (3-6).
Kyrgios se ha tomado en serio su carrera, se entrena, come y descansa. Se acabaron las salidas nocturnas a beber cervezas en mitad de un campeonato. Su novia le ha ayudado a serenarse, dentro de la peculiar troupe que le arropa y le anima, aunque no siempre le guste que celebren incluso sus errores. Ahora, crecido y sabedor de su potencial, es m¨¢s peligroso que nunca. Vuelve virtualmente al top-20 y no est¨¢ m¨¢s arriba porque en Wimbledon no se repartieron puntos.