Sinner derriba a Djokovic para jugar su primera final de Grand Slam
El italiano puede con el serbio, que no perd¨ªa en Melbourne desde 2018 (33 victorias consecutivas). Se enfrentar¨¢ el domingo a Medvedev.
Parec¨ªa imposible que alguien volviera a ganar a Novak Djokovic en el Open de Australia, pero todo principio tiene un final, y el de la racha del serbio, que se queda en 33 victorias consecutivas desde su ¨²ltima derrota en 2018 (contra Hyeon Chung) en la Rod Laver Arena, lleg¨® este viernes. El culpable, un Jannik Sinner inconmensurable (6-1, 6-2, 6-7 (6) y 6-3 en 3:22) que da el salto de calidad y grandeza que se esperaba de ¨¦l y el domingo (09:30, Eurosport) jugar¨¢ su primera final de Grand Slam ante el ruso Daniil Medvedev. ¡°Estaba buscando un partido como este y siempre es agradable tener a esta clase de jugadores de los que puedes aprender. Perd¨ª el a?o pasado en las semifinales de Wimbledon y aprend¨ª mucho. Es parte del proceso¡±, dijo Jannik, que se ha impuesto a Djokovic en tres de sus ¨²ltimos cuatro duelos.
Lo que hizo el italiano, de 22 a?os y n¨²mero cuatro del mundo, tiene un m¨¦rito extraordinario, casi a la altura de la gesta de Carlos Alcaraz contra el propio Djokovic el curso pasado en el duelo por el t¨ªtulo de Wimbledon. Ganar al balc¨¢nico, si bien es cierto que estuvo muy lejos de su mejor nivel (ni una ocasi¨®n de quiebre en todo el encuentro), donde no hab¨ªa perdido nunca una semifinal (10-1 ahora) y ha sido campe¨®n en 10 ocasiones, no puede conseguirlo cualquiera. Fue una versi¨®n mejorada de Djokovic. ¡°Creo que jugamos de manera muy similar. Ten¨ªa que restar todas las bolas posibles, porque ¨¦l es un sacador incre¨ªble, as¨ª tienes que suponer un poco (d¨®nde va a sacar), tratar de presionar, moverse¡ tampoco voy a compartir las t¨¢cticas (con Jim Courier, su entrevistador en la pista)¡±, afirm¨® Sinner, un tenista superlativo, una aut¨¦ntica figura, por juego y personalidad. Un ejemplo dentro y fuera de la pista, lugares, ambos, donde tiene un comportamiento exquisito. Su ¨¦xito es muy bueno para el tenis.
M¨¦rito tambi¨¦n de sus entrenadores, Simone Vagnozzi y Darren Cahill, por plantear un partido t¨¢cticamente perfecto, aunque luego fuera el pelirrojo quien lo ejecutase de forma brillante, desde el saque, impecable, hasta los restos, veloces y con enjundia para evitar que Djokovic llevase la iniciativa y provocarle as¨ª muchos errores no forzados, sobre todo con el rev¨¦s, la batuta con la que suele dirigir los intercambios. No pudo hacerlo muy a menudo esta vez, porque golpeaba en posiciones muy forzadas. El sonido con el que acompa?aba los tiros, de angustia, delataba esa dificultad. Nadie le hab¨ªa hecho sentir tan inferior en Australia desde 2005, cuando Marat Safin le ape¨® en primera ronda con un 6-0, 6-2 y 6-1 demoledor. En otro escenario, Roland Garros 2020, Rafa Nadal tambi¨¦n le pas¨® por encima (6-0, 6-2 y 7-5).
Intento de reacci¨®n
Despu¨¦s de perder los dos primeros sets, Novak, de 36 a?os, necesitaba un milagro que hab¨ªa obrado en ocho ocasiones en majors, aunque nunca lo hab¨ªa conseguido en Melbourne (0-4 tras este partido). No obstante, su legendario esp¨ªritu competitivo le permiti¨® salvar un punto de partido en el tercer set y continuar con vida, pensando en aquel duelo contra Sinner en Wimbledon 2022, cuando le levant¨® al transalpino un 2-0. Sin embargo, no se le ve¨ªa c¨®modo con el sol y sombra de una cancha mayoritariamente poblada de banderas de Serbia, aunque el calor no fue un factor determinante (22 grados). M¨¢s maduro ahora, Jannik no se dej¨® sorprender de nuevo. La ocasi¨®n perdida en el desempate no le afect¨®. Sigui¨® a lo suyo y rompi¨® para ponerse con 4-1 en el cuarto parcial. Djokovic se lo tom¨® mal y le dio un raquetazo a un micr¨®fono de la silla del ¨¢rbitro. Despu¨¦s le falt¨® al respeto. ¡°?Vas a decir algo o simplemente vas a estar sentado y quedarte callado? ?No, todo bien? ?Quieres una taza de t¨¦, para relajarte un poco?¡±, le espet¨® despu¨¦s de que algunos espectadores hicieran ruido entre dos de sus servicios. La diferencia de edad entre ambos jugadores, 14 a?os y 86, la m¨¢s grande en una semifinal de Australia en Era Open, se hizo notar por momentos, porque Sinner se mov¨ªa de maravilla para atacar y para defenderse, mientras Nole ten¨ªa que recurrir de vez en cuando a estiramientos. No le tembl¨® el pulso a Jannik para aprovechar su segundo match ball, con una fina combinaci¨®n de derechas cruzada y paralela.
Su celebraci¨®n fue, como ¨¦l, moderada, aunque acaba de convertirse en el primer finalista italiano en la historia del torneo. Solo nueve tenistas de su pa¨ªs han llegado a una final de Grand Slam: Nicola Pietrangeli (4), Francesca Schiavone (2), Matteo Berrettini (1), Giorgio di Stefani (1), Sara Errani (1), Adriano Panatta (1), Flavia Pennetta (1) y Roberta Vinci (1). Y es el octavo jugador en activo que llega a una final del Open de Australia: Djokovic (11), Nadal (6), Murray (5), Cilic, Sinner, Thiem, Tsitsipas, Wawrinka. Zverev podr¨ªa ser el noveno. Djokovic seguir¨¢ siendo el n¨²mero uno, pero se le escapa la posibilidad de elevar a 25 su cifra de t¨ªtulos de Slam, con la que hubiera superado a Margaret Court (24) como el mejor de todos los tiempos. Ni mucho menos se rendir¨¢, aunque lo ocurrido en Wimbledon, la temporada pasada y ahora en las ant¨ªpodas son serias muestras de que los j¨®venes, por fin, le echan el aliento en la nuca.