Djokovic, a un paso de cazar a Nadal y destronar a Alcaraz
El serbio gana a Paul y jugar¨¢ el domingo contra Tsitsipas la final del Open de Australia con la opci¨®n de ganar su 22? Slam y volver a ser n¨²mero uno.
¡°Sin mi familia y mi equipo esto no hubiera sido posible. Tengo que agradecerles mi ¨¦xito¡±, dijo Novak Djokovic despu¨¦s de ganar por 7-5, 6-1 y 6-2 en 2h20 a Tommy Paul, con una actuaci¨®n irregular (39 errores no forzados) pero muy efectiva (12 aces para 31 golpes ganadores), y clasificarse para la final del Open de Australia. Su progenitor, Srdjan, decidi¨® no ver el partido en vivo, despu¨¦s de que el embajador de Ucrania hubiera exhortado a los organizadores del torneo a vetarlo. Su silla en el box del equipo del ganador, al lado de su esposa, estaba vac¨ªa. El viernes hab¨ªa sido ¡®cazado¡¯ en un v¨ªdeo, posando junto a un partidario serbio del presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, que bland¨ªa una bandera de ese pa¨ªs con la cara del pol¨ªtico.
Pese a esta nueva controversia, Djokovic (34 a?os) enlaza 27 victorias seguidas en el torneo, 40 en el pa¨ªs oce¨¢nico; jugar¨¢ su 10? final en el primer major del a?o, 33? de Grand Slam, con la que adelanta a Serena Williams en la segunda plaza de la tabla absoluta, por detr¨¢s de Chris Evert (34); nunca ha perdido una semifinal ni una final en la Rod Laver Arena; est¨¢ a un triunfo del empatar con Rafa Nadal a 22 t¨ªtulos de Grand Slam y ser de nuevo n¨²mero uno (ahora es cinco) en detrimento de Carlos Alcaraz, y tiene un balance de 11-0 en 2023 y de 10-2 contra Stefanos Tsitsipas, que ser¨¢ su rival el domingo (9:30, Eurosport). El n¨²mero cuatro del mundo, de 24 a?os, aprovech¨® la ventaja an¨ªmica que le dio contar con el apoyo masivo de una grada repleta de compatriotas griegos, para vencer en cuatro sets (7-6 (2), 6-4, 6-7 (6) y 6-3 en 3h21) a Karen Khachanov y plantarse en su primera final del Open de Australia, segunda de Slam tras la que perdi¨® en Roland Garros 2021 ante Djokovic. Habr¨¢ revancha, con el liderato del ranking en juego, ya que Stef tambi¨¦n aspira a ¨¦l y ser¨¢ el primer heleno que lo consigue si sale campe¨®n.
A toda la rabia acumulada que ten¨ªa por lo que le sucedi¨® el a?o pasado, cuando fue deportado de Australia por no estar vacunado contra el coronavirus (el primer ministro del Gobierno que le levant¨® la sanci¨®n de tres a?os sin poder entrar en el pa¨ªs, Anthony Albanese, estaba en la grada), y por su lesi¨®n en el muslo izquierdo, de la que parece bastante recuperado (¡±Estoy muy bien¡±, se?al¨®), se uni¨® la pesadumbre debida a las reacciones suscitadas por el pol¨¦mico comportamiento de su padre. En el calentamiento (recibi¨® algunos pitidos al ser presentado) y en el primer juego del partido parec¨ªa afectado. Poco a poco, intent¨® transformar la ira en ese tenis letal que ejecuta, sobre todo desde la ronda de octavos.
Reacci¨®n est¨¦ril
Pero su ventaja en el marcador la deb¨ªa m¨¢s a los errores iniciales de Paul (25 a?os y 35? del mundo), a quien se le iban largos algunos golpes, que a sus aciertos. Y cuando parec¨ªa volar hacia la final, se descentr¨®, discuti¨® con el juez de silla por el inicio de la cuenta del tiempo de saque y vio como un c¨®modo 5-1 se convert¨ªa en un inquietante 5-5 ante un rival que fue recuperando el tino. Por suerte para ¨¦l, el americano lo perdi¨® de nuevo en el peor momento. El balc¨¢nico fren¨® la remontada, hizo un gesto a la grada llev¨¢ndose la mano al o¨ªdo derecho y se llev¨® algunos abucheos.
Con energ¨ªas renovadas, Djokovic puso el piloto autom¨¢tico, devolvi¨® todas las bolas que le pon¨ªa un Paul muy combativo y le hizo otro doble break para ponerse con un 5-0 tranquilizador en la segunda manga. El resultado no hac¨ªa justicia a lo visto en la pista, pero cuando Nole juega para hacer historia pasan a menudo cosas as¨ª. Y, como quien no quiere la cosa, se puso a un set del partido por el t¨ªtulo. Y no desaprovech¨® la ocasi¨®n de ganarlo tambi¨¦n y cumplir con su objetivo por la v¨ªa m¨¢s r¨¢pida posible.