El God¨® supera su nuevo desaf¨ªo: M¨²nich
El torneo alem¨¢n, elevado este a?o a la categor¨ªa de ATP 500, coincide en fechas con el barcelon¨¦s, que sigue aglutinando casi el doble de tenistas top-20 y m¨¢s premios. El futuro ser¨¢ feroz.
Por si no fuera suficiente con iniciar una era sin Rafa Nadal, campe¨®n en 12 ocasiones, y de que esta edici¨®n transcurra en plena Semana Santa, cuenta el Barcelona Open con un competidor a?adido a partir de este 2025. Y de los fuertes. Se trata del Torneo de M¨²nich, que por primera vez ha sido elevado a la categor¨ªa de ATP 500, la misma que ostenta el God¨®, y que coincide en fechas con el torneo barcelon¨¦s.
Se disputa la competici¨®n alemana, hist¨®ricamente relegada a la semana que va a caballo entre finales de abril e inicios de mayo, y que hace dos a?os ya se avanz¨® a las fechas del God¨® aun siendo ATP 250, tambi¨¦n en la superficie de tierra batida, lo que propicia que los tenistas deban elegir. Hasta ahora, en la gira por arcilla muchos escog¨ªan hacer parada en Barcelona entre Montecarlo y Madrid, que arranca el lunes 21. Ahora se abre el abanico.
Sin embargo, el Barcelona Open ha superado con ¨¦xito su primera prueba de fuego. Mientras que en M¨²nich compiten cinco de los 20 mejores tenistas del mundo (Alexander Zverev, Taylor Fritz, Ben Shelton, Felix Auger-Aliassime y Ugo Humbert), al God¨® se han apuntado pr¨¢cticamente el doble, nueve: Carlos Alcaraz, Casper Ruud, Stefanos Tsitsipas, Andrey Rublev, Alex de Mi?aur, Holger Rune, Arthur Fils, Lorenzo Musetti y Frances Tiafoe.
Si bien es cierto que todos los cabezas de cartel de M¨²nich hab¨ªan participado anteriormente en el God¨® (Umbert, sin ir m¨¢s lejos, lo hizo el a?o pasado), no lo es menos que por ejemplo Rune se ha decantado por el God¨® aun habiendo sido campe¨®n del torneo germano en 2022 y 2023.
No en vano, y aunque al crecer de categor¨ªa M¨²nich quintuplica a partir de este a?o sus premios, de unos 500.000 euros a 2,5 millones, tambi¨¦n en ese aspecto sigue imponi¨¦ndose el trofeo de la Ciudad Condal, que reparte 2,889 millones.
Hacia un circuito con menos ATP 500
El desaf¨ªo aumentar¨¢ a?o tras a?o, puesto que el Iphitos Tennis Club de M¨²nich, donde se disputa desde 1974 este nuevo ATP 500, tiene en marcha una profunda renovaci¨®n de sus instalaciones, con un ambicioso plan de modernizaci¨®n. Frente a ello, pelea el God¨® con el car¨¢cter ¨²nico de un torneo de club, que tiene hechizados a tenistas como Tsitsipas.
Otra cosa es lo que suceda en el futuro, pues si bien en este 2025 los ATP 500 han pasado de 13 a 16 torneos, apunta el rumbo del tenis mundial hacia un nuevo circuito en el que se reducir¨ªa el n¨²mero de competiciones de esta categor¨ªa, por lo que la competencia entre las ya existentes ser¨¢ feroz.
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