Davidovich sigue cerca de Aliassime, pero vuelve a perder
El espa?ol cae por tercera vez en otro partido muy igualado contra el canadiense, que se enfrentar¨¢ en semifinales a Medvedev. El ruso sufri¨® ante O¡¯Connell.
Tan lejos, tan cerca, como suele decirse. As¨ª est¨¢ Alejandro Davidovich de ganar por fin a Felix Auger-Aliassime, compa?ero de generaci¨®n (tiene unos meses menos que ¨¦l), con m¨¢s ¨¦xito cosechado que ¨¦l, contra quien ha jugado, con esta, tres veces en nivel ATP y otra en Challenger, las cuatro con derrota en partidos muy igualados. En los tres ¨²ltimos hubo, al menos, un tie-break. Este jueves, en cuartos del ATP 250, el canadiense, segundo favorito, venci¨® de nuevo, por 6-4 y 7-6 (5) en 1h48, y se enfrentar¨¢ el viernes (sobre las 17:30) en su 24? semifinal a Daniil Medvedev. El ruso sufri¨® para superar en tres mangas (6-2, 4-6 y 7-5) al verdugo de Roberto Bautista en el torneo, el australiano Christopher O¡¯Connell.
¡°Gran tipo, gran jugador, ha sido una batalla en la que hab¨ªa que sacar y golpear muy bien. Estoy muy feliz¡±, dijo el vencedor sobre Davidovich (23 a?os y 31? del mundo), que cedi¨® el primer set de una manera dolorosa. No hab¨ªa perdido m¨¢s que un punto en sus cuatro primeros turnos de servicio y se dej¨® cuatro en un solo juego, suficientes para que Auger-Aliassime (22 y 9?) lograra un quiebre decisivo que hizo bueno despu¨¦s con su saque. La igualdad hab¨ªa sido patente, quiz¨¢ a los puntos hubiera ganado el malague?o, pero el quebequense se llev¨® el asalto por KO.
La segunda manga transcurri¨® por parecidos derrotes en sus primeros compases, aunque las hostilidades al resto se desataron antes. Felix tuvo un 0-40 en el 3-2 y, acto seguido, Alex un 15-40 en el 3-3. Ninguno rompi¨® y continu¨® la pelea, un pim-pam-pum de golpeo joven y r¨¢pido entre dos rivales que se conocen muy bien. En plena pelea, fallo garrafal de Auger-Aliassime y charla con su equipo; remate fuera de Davidovich y taco (¡°Me cago en la puta¡±, se lament¨®).
Emociones fuertes
Tensi¨®n en cada punto. Se celebran los fallos del oponente sin pudor. Hasta llegar a un desempate en el que se adelant¨® el de Canad¨¢. Sin embargo, tir¨® la ventaja con una doble falta. Luego la recuper¨® en un punto maravilloso y la desperdici¨® de un nuevo por un error de bulto, pero se puso con bola de partido y no la desperdici¨® al hacer in¨²til con un buen resto la subida de Davidovich.