Bautista se estrella en el tel¨®n de acero de Medvedev

Roberto Bautista no encontr¨® la manera de superar el tel¨®n de acero, el muro infranqueable en el que se convierte Daniil Medvedev cuando alcanza su versi¨®n m¨¢s s¨®lida y fue vapuleado por el ruso (doble 6-1 en 64 minutos), que se enfrentar¨¢ este s¨¢bado (14:00, Deportes por Movistar+) a Novak Djokovic en las semifinales del Astana Open. El castellonense, que dominaba por 4-1 en el cara a cara antes de este ¨²ltimo enfrentamiento, y hab¨ªa vencido a Medvedev este mismo a?o en Mallorca, jug¨® al front¨®n ante un rival con una movilidad impresionante, a pesar de medir casi dos metros (1,98) y que le devolvi¨® casi todos los golpes.

Esta era la quinta vez en la que ambos se med¨ªan en unos cuartos de final. Daniil respeta mucho a Roberto, pero le ten¨ªa ganas y celebr¨® cada punto con especial intensidad. De esa manera sum¨® su victoria 40 en lo que va de curso y es la cuarta vez en su carrera que alcanza al menos esa cifra en una misma temporada.

Al moscovita le sali¨® todo bien, lleg¨® a las dejadas, ejecut¨® los pasantes a las mil maravillas, incluso a la remanguill¨¦, y sac¨® de esa manera que parece tan improvisada, pero que es sumamente efectiva, como en sus mejores momentos. De rev¨¦s a rev¨¦s no fall¨® una y alcanz¨® con solvencia la mayor¨ªa de los paralelos del espa?ol, que no se entreg¨® cuando perd¨ªa por 4-0 en el segundo set, pero acab¨® fundido entre tanto intercambio largo. Si no se hubiera venido arriba cuando ten¨ªa el partido ganado con su saque, Rober, un profesional sin tacha, no se habr¨ªa librado del rosco.

Consistencia y sorpresa

¡°S¨¦ que Roberto puede jugar mejor de lo que lo hizo hoy, porque lo ha probado muchas veces, no solo contra m¨ª. Pero el tenis no es f¨¢cil, un d¨ªa te sientes mejor y otro peor. Estoy feliz de hacer jugado el tenis correcto, ser s¨®lido y hacer todo lo que pude para hacerle la vida dif¨ªcil y ganarle¡±, dijo Medvedev, que utiliz¨® una mezcla de consistencia y agresividad. ¡°Trat¨¦ de jugar a no fallar algunas veces, que me tuviera que ganar ¨¦l, y otras sorprenderle, una mezcla contra un rival con el que no es f¨¢cil jugar¡±.