El triunfo del currante

Tras el oropel de los megacracks, el circuito ATP se nutre de muchos currantes. Tenistas modestos que, en torneos sin tanto foco, viven de tanto en cuanto una semana m¨¢gica. Como la de Roberto Carball¨¦s, que a sus 30 a?os logr¨® su segundo t¨ªtulo tras el de Quito 2018 tras batir a Alexandre Muller por 4-6, 7-6 (3) y 6-2 en tres horas en el ATP 250 de Marrakech (Marruecos).

Carball¨¦s, tinerfe?o de nacimiento y granadino de adopci¨®n, arranc¨® el torneo 82? del mundo y saldr¨¢ entre los 50 primeros (49?). Su mejor ranking. En el camino hacia su segunda final, en siete d¨ªas de inspiraci¨®n, dej¨® en la cuneta a tres cabezas de serie: Cressy (38?), Griekspoor (35?) y Evans (30?).

Sobre el papel, el franc¨¦s Muller, de 26 a?os, deb¨ªa ser lo m¨¢s f¨¢cil por su r¨¢nking (126?) y porque s¨®lo contabilizaba tres victorias en el circuito de grandes torneos. Pero para el obrero, sin mucho trabajo no hay gloria. As¨ª que toc¨® remontar. Tras desperdiciar tres bolas de rotura, el galo logr¨® un break para 4-3 en la primera manga que mantuvo.

En la segunda, el primero en quebrar fue el espa?ol, pero el contrabreak lleg¨® de inmediato y en el desempate Carball¨¦s impuso su experiencia y el mayor peso de bola de su drive. En la tercera, Roberto comenz¨® como un tiro con break y el f¨ªsico pas¨® factura a Muller, que tuvo que ser atendido por molestias en su pierna izquierda. Con otro break (5-2) y saque, Carball¨¦s a¨²n tuvo que levantar tres bolas de rotura. El disfrute ten¨ªa que llegar con sufrimiento hasta tocar el trofeo, ese oasis que a veces se aparece en mitad del desierto habitual. El tercer t¨ªtulo del tenis espa?ol este a?o tras los dos de Carlos Alcaraz (Buenos Aires e Indian Wells).