Una Copa para olvidar
La Copa Davis, que encara su fase de grupos, ofrece esta semana un doble desquite para el tenis espa?ol. Lo es para la Selecci¨®n de David Ferrer, que intentar¨¢ resarcirse de su fea eliminaci¨®n del a?o pasado en esta misma fase y en este mismo escenario de Valencia. Sus tropiezos ante Chequia y ante la Serbia de Novak Djokovic, con seis derrotas consecutivas, dejaron a Espa?a fuera de la fase final de M¨¢laga. Y lo es para Carlos Alcaraz, que reaparece despu¨¦s de su alica¨ªdo paso por la gira de Estados Unidos, donde perdi¨® dos de sus tres partidos, que son tres de cuatro si corremos el dato hasta la final ol¨ªmpica de los Juegos de Par¨ªs y su llorada plata ante Nole.
Hay una diferencia notable entre aquel equipo abatido en 2023 y el que debuta el mi¨¦rcoles con ganas de revancha, casualmente otra vez ante Chequia, que entonces le endos¨® un 3-0 sin piedad. Ese distintivo es la participaci¨®n de Alcaraz, el n¨²mero tres del mundo. El ¨²nico consuelo para el p¨²blico de su resbal¨®n en el US Open es que le ha catapultado directamente a la Davis. Sin vacilaciones. Ahora la inc¨®gnita es saber qu¨¦ versi¨®n de Carlitos saltar¨¢ a La Fonteta, si veremos al campeon¨ªsimo que este a?o ha sumado un doblete de grandes con Roland Garros y Wimbledon, o al titubeante jugador que proyect¨® una imagen desconocida en agosto. Dice el propio Alcaraz, para explicar la crisis, que le he faltado descanso en ¡°un verano intenso¡±. Y dice Ferrer, el experimentado capit¨¢n, que ve bien al murciano en los ensayos, que ¡°ya ha podido descansar¡±. La Davis, que se vive en el calor de un equipo, se presenta como un buen b¨¢lsamo para recuperar vibraciones. Es un torneo para la redenci¨®n. De Alcaraz. Y de la Selecci¨®n. Una Copa para olvidar los males. Con una Ensaladera al fondo.