Una baja m¨¢s significativa que angustiosa
Dej¨® noticias el Madrid-Alav¨¦s: se lesion¨® Mbapp¨¦, que no jugar¨¢ el primer derbi de la temporada y se apur¨® el personal con la arremetida final del equipo vitoriano. No es noticia el calambre temperamental de Vinicius. Ni se sujeta, ni parece que tiene intenci¨®n de hacerlo, al menos en el campeonato espa?ol. Fuera ofrece una versi¨®n m¨¢s contenida y, desde luego, de menos riesgo para ¨¦l y para su equipo. Vive peligrosamente, al borde de las dos amarillas en cada partido.
El Madrid no acaba de completar un encuentro a la altura de las expectativas que despierta. Gana altura en la clasificaci¨®n con la racha de victorias -cuatro consecutivas en la Liga y una en la Copa de Europa-, pero hasta el momento siempre deja una nota de incertidumbre. Recibi¨® tres remates a los palos en Anoeta, el Stuttgart le super¨® en el primer tiempo y le oblig¨® a un gran esfuerzo en la segunda parte, el autogol de Courtois contra el Espanyol provoc¨® una breve alarma y el Alav¨¦s elev¨® la tensi¨®n al estado de alerta m¨¢xima en los ¨²ltimos diez minutos del partido.
Llega el derbi para resolver dudas en los dos equipos, cada uno por razones diferentes. En el Real Madrid por su dificultad para alcanzar el grado de competencia que alcanz¨® en la temporada anterior. En el Atl¨¦tico, poco competente en el pasado curso, Simeone intenta ajustar nuevas piezas, unas con m¨¢s ¨¦xito -Gallagher, LeNormand- que otras -Sorloth, Juli¨¢n Alv¨¢rez-.
La ausencia de Mbapp¨¦ provocar¨ªa sudores fr¨ªos en cualquier otro equipo. Aunque todav¨ªa no es el deslumbrante jugador que espera el madridismo, sus destellos son m¨¢s que suficientes para intuir la clase de impacto que pronto producir¨¢. Es dif¨ªcil, sin embargo, encontrar un equipo m¨¢s preparado que el Real Madrid para solucionar esta clase de problemas.
En esta temporada y en la anterior, el interrogante en el Madrid gravitaba sobre la defensa, en concreto sobre su densidad de zagueros y especialmente los centrales. La lesi¨®n de Alaba elev¨® la preocupaci¨®n en el entorno, pero no en el club. Nacho respondi¨® con una efectividad sensacional y Tchouameni funcion¨® en el eje defensivo tan bien o mejor que en el medio campo.
El Madrid gan¨® la Liga y la Copa de Europa, una manera inequ¨ªvoca de responder a las dudas, y se mantiene en su pol¨ªtica. No logr¨® el fichaje del joven franc¨¦s Yoro -raro que el Madrid no consiga su objetivo en el mercado- y no cuenta en sus filas con Nacho, que ha sido un tefl¨®n de futbolista: aguantaba y pod¨ªa con todo lo que le echaran encima. Esta presunta carencia de defensas es uno de los grandes temas de la temporada, como lo era tres temporadas antes la escasez de delanteros. Benzema, Vinicius y Rodrygo, adem¨¢s de Valverde como ocasional extremo de largo recorrido, se las apa?aron para ganar la pen¨²ltima de las 15 Copas de Europa del club.
El paisaje ha cambiado radicalmente este a?o. No est¨¢ Joselu, insospechado y enorme contribuidor al ¨¦xito en la Liga y en la Copa de Europa, pero el Madrid tiene todas las bases cubiertas en la delantera. La contrataci¨®n de Mbapp¨¦ no ha impedido la llegada del jovenc¨ªsimo Endrick, que no se ha sentido intimidado por una camiseta que a tantos otros les ha pesado una tonelada. G¨¹ler ya apunta alto y Brahim, ahora tambi¨¦n lesionado, juega cada partido como si fuera el ¨²ltimo de su vida.
Con este paisaje, la baja de Mbapp¨¦ da?a al Madrid, pero no provoca angustia en sus filas, ni en su entorno. Tiene delanteros para regalar, de primer¨ªsima clase todos ellos.