Un alir車n interrumpido por los b芍rbaros
Sin el gol de Asensio al Getafe, y dado que el Atl谷tico perdi車 imprevistamente en Elche, el Bar?a hubiera saltado anoche al campo ya campe車n. Pero no fue as赤, y el Bar?a remach車 el clavo con un rotundo 2-4 en Cornell角, tras lo cual intent車 festejar con toda l車gica, pero la actitud b芍rbara de los ultras del Espanyol puso a los campeones en fuga. El corro no ten赤a ning迆n aire de provocaci車n a mi modo de ver, pero cay車 mal entre los radicales del Espanyol, para los que la perspectiva es catastr車fica. El equipo est芍 en descenso y le queda visitar al Rayo y al Valencia y recibir al Atleti y al Almer赤a. Y lo de anoche podr赤a provocar un cierre de campo.
M芍s all芍 de esa imagen final, queda LaLiga del Bar?a, ganada con cuatro jornadas de antelaci車n y acompa?ada del Zamora, que ya nadie podr芍 arrebatarle a Ter Stegen, y del Pichichi, que podamos dar por seguro en manos de Lewandowski, ahora que ha renovado su distancia con Benzema. LaLiga es un premio mayor de nuestro f迆tbol y del de cualquier pa赤s, porque se juega en cuatro estaciones, en todos los campos, acumulando viajes, pisando campos embarrados, o duros, o irregulares, o tambi谷n algunos que son como tapetes de billar, m芍s abundantes cada vez, gracias a Dios. Se gana contra viento y marea, por regularidad.
Un t赤tulo que tiene sobre todo un nombre, el de Xavi, que ha construido un equipo en poco tiempo, le ha dado estabilidad, ha encajado piezas, ha superado lesiones, ha surfeado una realidad loca del Bar?a, cuyo presidente es un err芍tico optimista, que anoche reluc赤a su mejor sonrisa. El Bar?a, visto como club, es un foll車n inacabable, pero tiene como peana este equipo campe車n que compensa muchos sinsabores y que puede ser tomado como base para un tiempo nuevo. Para eso vino Xavi, que el curso pasado cogi車 al Bar?a en el octavo puesto y que anoche retir車 sabiamente y sin drama a sus jugadores, para que su alir車n no ofendiera.