Ser Guardiola... o ser Klopp

Hist¨®rica rivalidad. Lo m¨¢s dif¨ªcil de ser una leyenda es saber irse a tiempo. Uno se siente tan querido que nunca ve el final. En realidad, es su final, y eso no es del gusto de nadie, mucho menos de aquellos acostumbrados a logros y haza?as inalcanzables para el resto. En la Premier hubo en los ¨²ltimos tiempos una lucha encarnizada e hist¨®rica entre Guardiola y Klopp, entre Klopp y Guardiola, dos entrenadores colosales, antag¨®nicos, dos estilos que hicieron de City y Liverpool equipos fascinantes, de autor, conjuntos exitosos e inolvidables.

Desenlace. Coincidieron en el tiempo ¨Ccomo ya ocurri¨® en Alemania¨C y coincid¨ªan m¨¢s o menos en sus finales de trayecto. O eso parec¨ªa, porque Klopp hizo las maletas y se march¨®, mientras que Guardiola decidi¨® quedarse y renovar por dos a?os m¨¢s en M¨¢nchester. Uno sali¨® de Anfield vitoreado como nunca nadie antes de all¨ª; el otro quiso frotar tanto la l¨¢mpara en el Etihad que agot¨® los trucos del genio que es. Han pasado apenas unos meses desde que J¨¹rgen y Pep se separasen, y es como si lo bueno de estar juntos se hubiera convertido en una pesadilla sin la referencia del otro, en el caso del catal¨¢n.

Ciclos. Guardiola afronta la mayor crisis de su carrera como t¨¦cnico y est¨¢ en un t¨²nel del que no se vislumbra final; en cambio, el Liverpool, ya sin Klopp, que ha quedado como una especie de Cruyff ideol¨®gico y sentimental para el club, se rehace de manera grandilocuente con Arne Slot, su relevo: l¨ªder destacado en la Premier, l¨ªder tambi¨¦n en la Champions, semifinalista de la Carabao y a¨²n vivo en la FA Cup.

Inesperado. Qui¨¦n hubiera dicho cuando el Liverpool perdi¨® a Klopp y el City mantuvo a Guardiola que la temporada les ir¨ªa mejor a los reds que a los citizen. Qui¨¦n puede detenerse a pensar en otros modelos de ¨¦xito cuando est¨¢ borracho de sus propios ¨¦xitos. Pero es el f¨²tbol, es la vida, son los ciclos. Nada es eterno, todo est¨¢ en movimiento. Tambi¨¦n para las leyendas. Sobre todo, para ellas.

Hoy descubrimos a¡­ Tolu Arokodare (2000). Las Navidades no s¨®lo sirven para disfrutar del f¨²tbol ingl¨¦s, tambi¨¦n del belga. All¨ª tampoco paran, lo que permite fijarse un poco m¨¢s en jugadores como este atacante nigeriano del Genk que es la gran sorpresa del campeonato, m¨¢ximo goleador y l¨ªder del actual l¨ªder. Con su doblete al Amberes ya supera sus propias cifras del curso pasado. Potente, con mucho gol y espigado. Un Osimhen en potencia.

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