Rumbo y derrota

Cuando vuelas, el rumbo es donde apunta el morro del avi¨®n y la derrota es la trayectoria real sobre la superficie del terreno. Habitualmente, la trayectoria planeada no coincide con la real. Y esto es lo que le pasa al Bar?a. El club apunta a la Liga, a la Copa y tal vez tambi¨¦n a la Champions pero la derrota no le est¨¢ llevando en esa direcci¨®n.

Jornada tras jornada, se desv¨ªa de su ruta original. Est¨¢n metidos en todas las competiciones pero sin llegar a convencer. Pueden ganar la Liga, aunque ahora mismo otros equipos est¨¢n mejor que ellos; en Champions, lo tienen bien para pasar a octavos como primeros tres a?os despu¨¦s, pero si pierden se exponen a caer incluso ganando en Amberes; y en la Copa del Rey se le espera al menos hasta semifinales.

Desde el d¨ªa del Cl¨¢sico, el equipo parece estar en ca¨ªda libre. Vencieron a la Real Sociedad y al Alav¨¦s sufriendo demasiado y sin convencer, perdieron contra el Shakhtar, cuarto de la liga ucraniana, y han empatado contra el Rayo. El Bar?a ha tenido todo el par¨®n internacional para seguir insistiendo en su idea de juego con dos de sus principales bazas: Pedri y De Jong, que no estaban con sus selecciones. Hab¨ªa razones para ser optimistas porque con De Jong el Bar?a no conoce la derrota, pero eso tampoco le sirvi¨® para ganar en Vallecas.

Todo se puede justificar, largas ausencias important¨ªsimas, errores arbitrales, la Prensa intentando desestabilizar a la plantilla, Xavi trabajando eternamente en su modelo de juego, rendimientos muy por debajo de lo esperado¡­ pero despu¨¦s de catorce jornadas, todo est¨¢ bastante claro. Esta temporada el Barcelona comparte varios problemas con el Real Madrid, encajan demasiados goles en la primera mitad y han perdido a jugadores important¨ªsimos como Gavi, Courtois o Militao. Pero se diferencian en algo fundamental, la parte de arriba. El Madrid tiene jugadores autosuficientes como Rodrygo, que resuelven partidos y el Bar?a a Lewandowski: 2 goles en 584 minutos. Su nivel de efectividad est¨¢ a la altura de equipos como Almer¨ªa o Celta. Generan mucho, pero convierten muy poco. Eso, la falta de dinamismo en tres cuartos, las pocas llegadas desde segunda l¨ªnea, la escasez de f¨²tbol y la poca confianza que muestran los jugadores son los grandes problemas del Bar?a de esta temporada. Debe resolverlo ya porque tiene partidos complicados por delante: Porto, al que a duras penas venci¨® en Portugal, Atl¨¦tico y un Girona que va a por todas.

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