Rahm fluye en casa
S¨®lo ha pasado un a?o, pero el contraste es grande. En 2021, Jon Rahm regres¨® a Espa?a subido en la ola del ¨¦xito, como n¨²mero uno del mundo y campe¨®n del US Open. Era una situaci¨®n ideal para agarrar fuerte la bandera que tanto le gusta ondear, la de la continuaci¨®n del legado de Severiano Ballesteros, que no es otra cosa que la expansi¨®n del golf en su pa¨ªs. A Rahm le gusta ser agradecido con la Federaci¨®n, que le catapult¨® cuando s¨®lo era un joven aspirante, y con un p¨²blico fiel que le adora, aunque a veces le desconcierte porque aplaude hasta sus fallos¡ El Le¨®n de Barrika tuvo gestos excepcionales durante su periplo por el Open de Espa?a y el Andaluc¨ªa Masters, como el d¨ªa que atendi¨® durante m¨¢s de una hora a los ni?os en el Club de Campo. Estuvo entregado a la causa, pero no pudo rematar la faena con un colof¨®n deportivo. Al rev¨¦s, en Valderrama ni siquiera pas¨® el corte y, para colmo, cerr¨® con una preocupante frase: ¡°Es la primera vez en mi vida que no quiero ver un palo de golf¡±. Despu¨¦s de una intensa temporada, Rahm revent¨® en Espa?a. Estaba saturado.
Rahm ya no ocupa el trono mundial, sino la sexta plaza, y no ha acabado ning¨²n major en el top-10, lo que ha roto su habitual regularidad. No ha jugado del todo mal, pero no ha culminado. Los resultados no han acompa?ado durante un curso en el que s¨®lo ha ganado el Abierto de M¨¦xico, que sabe a poco despu¨¦s de sus prestaciones anteriores. Pero hay algo que no ha cambiado: Rahm sigue volcado con la afici¨®n, con su pa¨ªs, con el Club de Campo, con el Open¡ Sigue al frente de su misi¨®n, con Seve como inspiraci¨®n. Paralelamente, el juego tambi¨¦n ha fluido. Ayer, en la primera jornada, termin¨® con los mejores, a un golpe del liderato, y con momentos que defini¨® como ¡°perfectos¡±. Es un buen lugar para resurgir. All¨¢ donde hace un a?o colaps¨®. All¨¢ donde creci¨® y se form¨®. En su casa.