Que toque el Liverpool... o el PSG
En su salsa.- En las 31 ediciones disputadas hasta la fecha de la Champions (la &hija* educada y eficiente de la Copa de Europa), el Real Madrid es el 迆nico que ha estado en todas y el 迆nico que jam芍s dej車 de clasificarse para los octavos de final. Eso se llama saber competir y convivir sin estr谷s con esa mochila de la historia que le obliga continuamente a superarse y a mejorar el sobresaliente del curso anterior. Por eso, el equipo de Ancelotti se tom車 muy en serio el partido aparentemente sencillo ante los descendientes de Braveheart (aunque no imagino a tanto japon谷s luchando al lado de William Wallace en las verdes laderas monta?osas de Escocia). El Madrid se puso las pilas y dej車 alto de nuevo el pabell車n del f迆tbol espa?ol, al ser el 迆nico que entrar芍 el lunes en el bombo de la Europa A, encima como cabeza de serie. Con un poquito de envidia indisimulada le mirar芍n el Bar?a de Xavi, el Sevilla de Sampaoli y el Atleti del Cholo, nuestros tres embajadores que se han quedado en la cuneta. Al menos, los dos primeros disfrutar芍n de la pedrea de la Europa League, que te da una opci車n de salvar la temporada si la ganas. Mis vecinos del Atleti, ni eso. En las gradas del Bernab谷u se repiti車 el chiste que empieza a ser un cl芍sico en los 迆ltimos diez a?os: ※?Qu谷 es el cholismo? Un a?o sin Champions y otro lo mismo...§.
Viva Scotland.- Aunque ya se sabe que la hinchada brit芍nica es propensa a la ingesta generosa, sobre todo de cerveza, lo que a veces les lleva a descontrolar en exceso, hay que decir que la afici車n del Celtic es especial y tiene su encanto. Los 5.000 leones verdes que hab赤a dentro del Bernab谷u y los 5.000 que se quedaron fuera sin entrada (el Madrid supo mover los hilos para que no le pasase como al Bar?a con los 30.000 hinchas del Eintracht en el Camp Nou) dieron colorido, sonido y ambiente de gran noche europea en una tarde-noche que a priori se presentaba descafeinada dado que los dos equipos aterrizaban con su cuartilla completada: el Madrid, en octavos pasase lo que pasase, y el Celtic fuera de Europa sin opci車n alguna de meterse ni siquiera como tercero de grupo. Fue vibrante escuchar en el Bernab谷u el We*ll never walk alone, invento de esta buena gente y no del Liverpool, por m芍s que Anfield parezca tener la patente del mejor himno del f迆tbol (por cierto, ojal芍 en el sorteo del lunes nos tocase el equipo de Klopp). En 2017 les dieron a los del Celtic el premio a la Mejor Afici車n. Aqu赤 han dejado huella y cari?o. Friends for always...
Un goleada coral.- Cuando tu equipo mete cinco y todos se reparten la autor赤a de los goles (Modric, Rodrygo, Vinicius, Asensio y Valverde) es que el conjunto ha trabajado por el bien del colectivo, sin tics umbilicales ni egos buscando la portada del AS. Ancelotti, tras pisar su equipo dos c芍scaras de pl芍tano ante Leipzig y Girona, recuper車 el buen humor, el juego festivo y vertical, el gusto por combinar con sabidur赤a en busca de la porter赤a defendida por el veterano Hart. Una noche feliz, sin estridencias ni renglones torcidos. Hasta Courtois sac車 su versi車n de la 14 parando un penalti. Y volvieron Benzema y Ceballos. Regres車 el buen rollo.
A por la 15.- Una vez cumplido el objetivo de acabar en el Everest del grupo, la afici車n me traslada su fe en este equipo al que nadie se atreve a ponerle techo. Para el sorteo del lunes quieren al Liverpool o al PSG (?tiembla, Messi; prep芍rate, Mbapp谷!), convencidos de que la ruta de la 14 puede repetirse esta temporada. Me insiste en ellos Stewart Wolfenson, el infatigable presidente de la Pe?a de Los ?ngeles, al igual que Carlos S芍nchez de Le車n, el presidente de la Pe?a Central London. En EEUU y en Inglaterra aman al Madrid igual que en la piel de toro. Es el madridismo sin fronteras. Y todos creen en la 15. ?Por qu谷 no?