Por fin cant¨¦ el ¡®We are the Champions¡¯
El 3 de agosto de 1986 disfrut¨¦ de una de esas noches que marcan tu existencia para siempre (para bien). Un servidor era un chaval de 21 a?os que viv¨ªa en plena euforia futbolera. Mi Madrid hab¨ªa ganado su segunda Copa de la UEFA consecutiva, tras superar al Colonia de Schumacher, Klaus Allofs y Littbarski a doble partido, y encima el Bar?a hab¨ªa fracasado en su empe?o de ganar su primera Copa de Europa al caer en el Pizju¨¢n ante el Steaua de mi h¨¦roe Helmuth Duckadam, que par¨® los cuatro penaltis de la tanda lanzados por Alexanco, Pedraza, Pichi Alonso y Marcos. En medio de esa euforia aterrizaba Queen en Madrid, con Freddie Mercury al frente. Dentro de su gira A Kind of Magic, nos regalaron un concierto memorable en el campo del Rayo. Vallecas herv¨ªa y yo ah¨ª abajo, a tres metros del escenario. Cuando son¨® el We are the Champions mi ingl¨¦s de cuarta categor¨ªa me hizo tararear s¨®lo el estribillo. Pero me hechiz¨®. Me dije: ¡°Cuando volvamos a ganar una Copa de Europa lo cantar¨¦ a capella...¡±.
Tuve que esperar otros 12 a?os, hasta que lleg¨® la final de ?msterdam ante la Juve imperial de Zidane y Del Piero. Yo lo vi en la grada, con una entrada que me regal¨® un buen amigo. All¨ª vibr¨¦ con el gol legal de mi Pedja Mijatovic, aunque no reaccion¨¦ hasta pasados diez minutos. Me puse a llorar como un beb¨¦, consciente de que por fin se cumpl¨ªa y viv¨ªa en primera persona todo lo que me hab¨ªa contado mi padre desde que llegu¨¦ a este mundo. Al acabar el gozoso partido me sub¨ª con mi acreditaci¨®n de prensa a la cabina de Onda Cero. Por entonces colaboraba con ellos. Alfredo Duro me cedi¨® sus cascos y son¨® por la megafon¨ªa el We are the Champions. Seguro que me invent¨¦ alguna palabra, pero lo cant¨¦ a pleno pulm¨®n con la emoci¨®n de saber que a partir de ah¨ª lo repetir¨ªa m¨¢s veces. Hasta 14. Como en aquella m¨¢gica noche de verano en Vallecas...