Ojal芍 Jenni deje de ser tan valiente
Jenni Hermoso apareci車 por la zona mixta de La Cartuja con los ojos rojos despu谷s de marcar un gol y conseguir la clasificaci車n para los Juegos Ol赤mpicos de Par赤s. Que lo hiciera fue otro triunfo porque las hab赤a evitado desde que gan車 el Mundial y no la dejaron tener la fiesta en paz. Supuso la conquista de otro espacio que no consideraba seguro y ten赤a motivos de sobra para ello. ※He pensado en todo el tiempo que llevo trabajando f赤sica y mentalmente para poder disfrutar y disputar un partido de alto nivel. Me dedico este gol y el triunfo de poder estar en unos Juegos§, afirm車 la jugadora.
Disfrutar de su profesi車n es su mayor victoria personal; liderar una revoluci車n deportiva y un cambio social con el ※hasta aqu赤 hemos llegado§, ※se acab車§, la que quedar芍 para la historia, pero estoy convencida de que nadie puede llegar a comprender del todo por lo que ha pasado. La angustia, la ansiedad, la presi車n, lo que debi車 sentir cuando en horario de m芍xima audiencia en televisi車n se emiti車 su declaraci車n ante la fiscal赤a; el acoso, los insultos y amenazas que a迆n hoy sigue recibiendo en redes sociales, el escrutinio p迆blico... eso s車lo lo sabe ella. Y a pesar de todo, de todos, volver no s車lo para jugar, sino para gozar. El coraje, la resiliencia, la inteligencia emocional con la que ha gestionado la situaci車n es sencillamente admirable, pero la lecci車n que deber赤amos aprender es que ninguna, nunca m芍s, tendr赤a que ser tan valiente. Porque ella s車lo quer赤a jugar al f迆tbol.
Para que as赤 suceda urgen cambios estructurales a los que la RFEF contin迆a resisti谷ndose, anclados en un sistema machista y feudal. Jenni Hermoso y sus compa?eras se merecen un respeto y no estar obligadas a seguir peleando por cada avance, dejar de desgastarse f赤sica y emocionalmente para obtener lo que ellos, sus colegas masculinos, dan por sentado. El cambio de sede de 迆ltima hora y la nula promoci車n han sido el 迆ltimo ejemplo, pero ya est芍 bien, ya basta. Ya se acab車, ?no?