Modric y Vinicius, Merl¨ªn y Gargant¨²a
El Madrid jug¨® en Bala¨ªdos un partido real y otro virtual, relacionado con el expeditivo traspaso de Casemiro al Manchester United. El equipo ingl¨¦s perdi¨® 4-0 contra el Brentford el pasado fin de semana y cinco d¨ªas despu¨¦s pag¨® 72 millones, m¨¢s unos jugosos incentivos, por el fichaje del centrocampista brasile?o. Con 30 a?os, una frontera que rara vez proporciona contratos de m¨¢s de uno o dos a?os, Casemiro ha firmado uno por cuatro a?os, s¨ªntoma de la confusi¨®n que preside el Manchester United.
En el Real Madrid, Casemiro ha sido un jugador impagable. Cost¨® muy poco (5,5 millones de euros en primera instancia y siete cuando regres¨® del Oporto) y su rendimiento ha sido extraordinario, b¨¢sico en la saga de ¨¦xitos del Madrid, tanto en Espa?a como en Europa.
La conexi¨®n Modric-Casemiro-Kroos figura entre las m¨¢s eficaces que ha visto el f¨²tbol en este siglo. En un equipo con fama de poco riguroso en el cap¨ªtulo defensivo, Casemiro ha funcionado como un dique impenetrable. De sus cualidades defensivas y de su inteligencia se ha dicho todo, pero de su contribuci¨®n ofensiva apenas se ha hablado. Minusvalorado en este aspecto, Casemiro (fenomenal cabeceador, buen rematador de media distancia y un notable oportunismo para reba?ar en el ¨¢rea contraria) multiplicaba su contribuci¨®n en las grandes ocasiones. Era un reloj en los peque?os partidos y en los grandes compromisos, un profesional que apartaba el ego en beneficio del equipo y del magisterio de Modric y Kroos.
Casemiro fue la ant¨ªtesis de los gal¨¢cticos que fichaba el Real Madrid. Su fichaje fue una nota a pie de p¨¢gina en los peri¨®dicos. Cuando regres¨® del Oporto se discuti¨® tanto su titularidad que termin¨® fuera de la alineaci¨®n que Rafa Ben¨ªtez perge?¨® para recibir al Bar?a en el Bernab¨¦u. Aline¨®, no sin indicaciones externas, a Modric, Kroos y James. El 0-4 fue tal ba?o de realidad que la titularidad de Casemiro no volvi¨® a discutirse jam¨¢s. Aquella derrota, de consecuencias dram¨¢ticas para Rafa Ben¨ªtez, sirvi¨® para configurar una l¨ªnea hist¨®rica en el medio campo.
Se fue Casemiro y el inter¨¦s radica ahora en el rendimiento de Tchouameni, reci¨¦n llegado al Madrid, que lo ha fichado por 80 millones de euros. Es el sucesor designado del brasile?o. En Bala¨ªdos, el Real Madrid se enfrent¨® al Celta, pero el jugador franc¨¦s se med¨ªa con Casemiro, partido virtual que no se celebr¨®. Luka Modric y Vinicius se ocuparon de impedirlo.
El Celta jug¨® bien, mejor que el Madrid en el primer tiempo, sin el que el marcador lo registrara (1-2). Vinicius ha alcanzado un grado tal de exuberancia que no juega los partidos, los devora. Este nuevo Gargant¨²a aterroriz¨® a la defensa del Celta, que no acaba de fortalecer una l¨ªnea que le genera problemas desde hace muchos a?os.
El apetito futbol¨ªstico de Vinicius crece en la misma medida que aprende los secretos del f¨²tbol. El joven extremo unidimensional que recal¨® en el Real Madrid se ha convertido en un jugador impredecible para los rivales: vertiginoso, h¨¢bil, decidido y en constante movimiento.
Pero adem¨¢s ya se nutre de las sutilezas que marcan la diferencia entre el futbolista de grandes condiciones y el inteligente que conoce al detalle el oficio y los c¨®digos del juego. Benzema ha encontrado el mejor y m¨¢s insospechado de los aliados. Por lo dem¨¢s, Vinicius no deja de hacer goles.
Modric gan¨® el Bal¨®n de Oro en el a?o 2018, despu¨¦s de largos a?os de injusto olvido en las votaciones. Igual de injusto ser¨ªa olvidarle esta temporada. Si no figura entre los cinco primeros de las votaciones, la ausencia del croata clamar¨¢ al cielo. Por si acaso, en Bala¨ªdos volvi¨® a quedar registro de su sabidur¨ªa.