Los nueve niveles del infierno
En ¡®La Divina Comedia¡¯, obra cumbre del poeta italiano Dante Aligheri, el infierno tiene nueve niveles. Este s¨¢bado, el Numancia ha descubierto otro m¨¢s en su historia particular. Consuma el tercer descenso en cuatro a?os, algo impensable otrora. Un barco a la deriva desde que el soriano Francisco Rubio se cans¨® de tirar del carro. Ingrato recuerdo dejaron Mois¨¦s Israel & company, y ahora, el grupo inversor, los ecuatorianos de Independiente del Valle consuman un descenso al pozo. Curioso que tan s¨®lo dos semanas atr¨¢s, ese grupo inversor anunciara la compra del equipo colombiano Atl¨¦tico Huila. Ya son tres equipos en su haber: Independiente, Huila y Numancia. Lo cierto es que cuando Santiago Morales se nombr¨® presidente anunci¨® con educaci¨®n y humildad: ¡°Inversi¨®n econ¨®mica si fuera necesario¡±. A¨²n est¨¢ por ver. En la Junta de Accionistas del pasado mes de diciembre, el equipo soriano present¨® un d¨¦ficit de 1,2 millones de euros. Eso s¨ª, se realiz¨® ampliaci¨®n de capital para la entrada de una empresa soriana con accionariado en el club. A¨²n con ello, d¨¦ficit.
El ¡®marr¨®n¡¯ que ha tenido el bueno de Pablo Ayuso en cuatro partidos era gigante. ?C¨®mo iba a decir que no un soriano y numantino de pro? No es culpa suya el descenso. La mala suerte te acompa?a un partido, dos o incluso tres. Pero, despu¨¦s de una temporada entera, est¨¢s donde mereces. Y este descenso tiene nombre y apellidos. Lo siento, pero la sinceridad, la rabia y el dolor de seguir al Numancia desde finales de los 80 me hace se?alar a los jugadores y entrenadores (dos concretamente). ?D¨®nde estar¨ªamos si Diego Mart¨ªnez no hubiera sido cesado? Eso es jugar a las adivinanzas y nunca se sabr¨¢, as¨ª que es tonter¨ªa perder tiempo en eso. Pregunt¨¦ en sala de prensa si los jugadores han cre¨ªdo en alg¨²n momento de esta semana en que se pod¨ªa mantener la categor¨ªa. No puedo admitir, no me entra en la cabeza, que jug¨¢ndose la vida no muerdan desde el principio, no blasfemen y hagan aspavientos al colegiado, no arenguen al p¨²blico, no lleguen a la frontal y golpeen como si no hubiera un ma?ana. Aunque el bal¨®n se vaya al Campus Duques de Soria, pero muerde, muere matando. No. En lugar de eso dolor durante d¨ªas y ma?ana ya se ver¨¢ que logra mi repre.
Este Numancia ten¨ªa feromonas (por no decir otra cosa), cuando un presidente los pon¨ªa firmes en un vestuario. Cuando un entrenador era respetado con un grito. Cuando los Octavio, Nagore, Julio ?lvarez, Aitor, Boris, I?aki (y tantos otros) dirig¨ªan a los j¨®venes en el vestuario. S¨ª, escribo desde el cabreo. Y ?qu¨¦? Yo soy del CD Numancia.