Las narices de Lewandowski y su sanci車n
Apelaci車n ha rechazado la cautelar赤sima a Lewandowski, lo que significa que no jugar芍 el pr車ximo partido, pero no que no pueda obtener m芍s adelante en el TAD la revisi車n (y eventualmente remisi車n) de la sanci車n que le inhabilita para los dos siguientes. La cautelar赤sima era un tiro al aire, era imposible, porque sobre Lewandoswski pende sanci車n de tres partidos de los que el primero es de caj車n: segunda amarilla por el meneo a David Garc赤a. Los que podr赤an ser motivo de recurso razonable ser赤an los otros dos, consecuencia de ese gesto con la nariz cuyo destinatario se entiende que era Gil Manzano. Eso es lo que a迆n ha de mirar el TAD.
Gesto ofensivo en Alemania, seg迆n hemos sabido luego todos, algo as赤 como ※este anda con la nariz alta, es un arrogante§. No me parece m芍s grave que decir, como dijo Ancelotti, que determinado penalti ha sido inventado, de lo que sali車 indemne. Lo malo de este asunto es que tenemos precedentes para avalar cualquier decisi車n en primera, segunda o 迆ltima instancia, porque el f迆tbol espa?ol lleva decenios encallando en la cuesti車n de las sanciones disciplinarias. En el tiempo que llevo visto, han disminuido mucho, dir赤a que demasiado, las referentes a agresiones con o sin consecuencias graves, pero en cuanto a declaraciones hay un continuo vaiv谷n.
Hay que proteger la autoridad de los 芍rbitros, tacharles de venales en un arrebato es impresentable. Pero eso se puede conjugar con cierto grado de indulgencia provisional con protagonistas que hablan nada m芍s acabar el partido. Me parecer赤a sensato citarles a los dos o tres d赤as y preguntarles por lo que dijeron, lo que quisieron decir y si se ratifican. Con sus pulsaciones en reposo la mayor赤a admitir赤an su exceso, reparar赤an al ofendido y aqu赤 paz y despu谷s gloria. Pero mientras no se haga eso formalmente, muchos se podr芍n preguntar por qu谷 se admiten explicaciones extraoficiales de unos (Ancelotti, pongamos por caso) y no de otros (Lewandowski, por otro caso).