La Segunda es Mundial
Estamos en noviembre del a?o 2022 y ha comenzado el Mundial de f迆tbol. Todos los focos est芍n puestos en un peque?o pa赤s de la pen赤nsula ar芍biga. ?Todos? ?No! La Segunda Divisi車n resiste y la vida contin迆a para miles de aficionados.
Y es que la vida no ha sido f芍cil para los equipos de la divisi車n de plata; disputan una temporada larga y, cuando hay partidos de selecci車n, algunos equipos pierden a jugadores destacados en partidos clave. Lo vimos con Gragera o Djuka del Sporting de Gij車n o con un buen n迆mero de jugadores de la Real B de Xabi Alonso, que no pudieron participar en encuentros fundamentales de su club y terminaron descendiendo. Es m芍s, hasta Rubiales se atreve a decir que es la Selecci車n la que forma a jugadores (en este caso eran jugadoras). El d赤a a d赤a de los clubes est芍 muy infravalorado.
Pero ahora, en medio de un evento de selecciones de magnitud planetaria, nuestros clubes siguen jugando. Parece que no hay clase media. O sigues el Mundial con todo su boato o vives los intensos partidos en El Plant赤o o Ipurua. Est芍s en Primavera Sound o en una sala para cien personas.
Estos d赤as, vemos a dos entrenadores que representan ambas caras de la misma moneda: Luis Enrique y Abelardo. Fueron compa?eros en el Xeitosa, el Sporting de Gij車n, ganaron la Recopa con el Barcelona y se colgaron la medalla de oro ol赤mpica con la Selecci車n. Disputaron juntos dos Mundiales. Luis Enrique es una figura global, uno de los entrenadores m芍s populares del mundo, el Jorge Ilegal del f迆tbol, un outsider en el mainstream. Abelardo, h谷roe local, intenta levantar un equipo legendario en una regi車n que pierde 25 habitantes diarios. No dudo de la emoci車n del Mundial, pero, por una vez, la Segunda es la competici車n m芍s importante del pa赤s y podemos vivir emociones cotidianas con nuestro equipo sin esperar a que juegue La Roja, que no todo es ver a Coldplay tocando para 100.000 personas. Como dec赤amos en pandemia: ※ser negativo es positivo§. Los 迆ltimos ser芍n los primeros, aunque sea por un mes.