La mutaci¨®n del ¡®virus FIBA¡¯
Las tensiones parecen haberse suavizado. La FIBA suprimi¨® la Ventana de noviembre y, a cambio, la Euroliga para en febrero. La lluvia de convocados no se hizo esperar.


Despu¨¦s de un intenso mes de enero con siete jornadas, y del aperitivo de febrero con otras dos ya disputadas, la Euroliga ha parado dos semanas seguidas. No nos tiene acostumbrados a este vac¨ªo. La primera ha sido para respetar el hueco habitual de las Copas, que coinciden en fechas en todas las ligas dom¨¦sticas del continente, pero la gran novedad ha surgido en la segunda, dedicada a las Ventanas de selecciones. Desde el nacimiento de este modelo de competici¨®n, en noviembre de 2017, el torneo europeo nunca hab¨ªa frenado en esas fechas y, en consecuencia, nunca hab¨ªa cedido a sus jugadores a los equipos nacionales, lo que creaba desprop¨®sitos tales como presenciar al Real Madrid, por decir, jugando el mismo d¨ªa y a la misma hora que Espa?a. Si alguna vez se vio a alguno con los colores de su pa¨ªs, era gracias a voluntariosos viajes rel¨¢mpago desde su club a su selecci¨®n.
Las relaciones entre la FIBA y la Euroliga eran tan malas, que a veces hasta dise?aban calendarios para fastidio mutuo: por ejemplo, con duelos entre equipos turcos y espa?oles, el mismo d¨ªa de un Espa?a-Turqu¨ªa. Esas tensiones parecen haberse suavizado. La FIBA suprimi¨® la Ventana de noviembre y, a cambio, la Euroliga para en febrero. Hoy por ti y ma?ana por m¨ª. El efecto, l¨®gicamente, ha sido una lluvia de convocatorias procedentes de estos clubes. Espa?a ha llamado a diez jugadores, los mismos que Italia y Serbia, pero uno menos que Grecia, que es el pa¨ªs con m¨¢s. Algunos equipos se han quedado tambi¨¦n despoblados debido a esta situaci¨®n. M¨¢s o menos, lo que ocurre siempre en el f¨²tbol, pero el baloncesto ya no estaba habituado a estas cosas. El Real Madrid, por ejemplo, pierde a nueve jugadores, m¨¢s dos canteranos, entre ellos a los dos argentinos, Campazzo y Deck. La firma de la tregua tambi¨¦n tiene sus costes. El ¡®virus FIBA¡¯ se extiende a la Euroliga.
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