La horrible derrota de Djokovic
Novak Djokovic alterna la vida entre su Belgrado natal, su Marbella fraternal y su Montecarlo oficial, pero lo de jugar en casa parece que se le atraganta un poco, sobre todo en el Principado, su residencia titular, de cuyo Masters 1.000 volvi¨® a salir por la puerta de atr¨¢s. Desde el ¨²ltimo de los dos trofeos que ha levantado en M¨®naco, en 2015, Djokovic no ha logrado superar los cuartos. El a?o pasado sucumbi¨® en su estreno ante Alejandro Davidovich, posterior subcampe¨®n. Aquella derrota no extra?¨® tanto, porque Nole ven¨ªa de enlazar una larga inactividad y varias experiencias amargas que le afectaron emocionalmente, como su expulsi¨®n de Australia y su veto en Estados Unidos por su negativa a vacunarse. Al serbio le cost¨® recomponerse, pero lo hizo... A continuaci¨®n encaden¨® final en Belgrado, semifinal en Madrid, t¨ªtulo en Roma, cuartos en Roland Garros ante Rafa Nadal¡ La tierra no es su mejor superficie, pero sabe adaptarse y dominarla.
Su tropiezo de este jueves, en octavos ante Lorenzo Musetti, ofreci¨® una imagen similar. Fue un Djokovic desdibujado, que sum¨® 46 errores no forzados y ocho breaks en contra, en un partido espantoso que merecieron perder los dos. Nole pas¨® de su ¡°fea¡± victoria ante Ivan Ghakov, a su ¡°horrible¡± derrota ante Musetti, siempre seg¨²n sus palabras. Esta vez tambi¨¦n tiene la excusa de la inactividad, reprobado de nuevo en Indian Wells y Miami. Y exhibi¨® alguna molestia, en su caso siempre marcadas por un asterisco. Los pr¨®ximos torneos dictar¨¢n si son pretextos v¨¢lidos. El caso es que no s¨®lo perdi¨®, sino que jug¨® mal. A efectos pr¨¢cticos de futuro, el resbal¨®n tampoco tiene demasiada importancia, incluso sumar¨¢ un pu?ado de puntos en Montecarlo al frente del n¨²mero uno, pero las sensaciones proyectadas abren interrogantes que tendr¨¢ que cerrar en semanas venideras... Como ya hizo en 2022.