La costumbre de ganar cambia de acera en Sevilla

La contrariedad

La victoria lo sustenta todo en el f¨²tbol. Se impone como la ¨²nica realidad vigente, sin importar ninguna otra cuesti¨®n. El Sevilla de Lopetegui gan¨® tantas veces sin saber c¨®mo que ahora se ve abocado a una crisis de identidad que se arrastra desde el final de la temporada pasada. Su dureza competitiva se ha reblandecido hasta el m¨¢ximo. En Almer¨ªa complet¨® una gran primera parte, con ?liver, Lamela y Papu en sinton¨ªa, pero se fue empatando de forma absurda con el gol de Ramazani al descanso. Y cuando se quiso dar cuenta ya iba perdiendo a causa de Sadiq. Entonces se qued¨® sin capacidad de reacci¨®n, preso de la precipitaci¨®n y con un esquema de juego deficitario. El abuso de los centros laterales ¡ª66 entre estas tres primeras jornadas de Liga¡ª y el escaso f¨²tbol interior simplificaron la protecci¨®n al Almer¨ªa. Jug¨® tan mal como antes hab¨ªa hecho m¨¦ritos para salir vencedor. Pero el Sevilla ha olvidado la ra¨ªz exitosa de su juego, a?ora las figuras de Kound¨¦ y Diego Carlos y no domina el ¨¢rea rival. Se ha roto el v¨ªnculo ganador del Sevilla y la crisis es evidente. Ha pasado de ganar sin saber c¨®mo a perder sin saber por qu¨¦. Aun as¨ª, no est¨¢ tan lejos como parece del triunfo como antes no estaba tan lejos de la derrota.

Un baluarte

Las sonrisas van por barrios. La pesadumbre del Sevilla disiente con la alegr¨ªa del Betis, col¨ªder en un inicio en el que ha demostrado su progresi¨®n. Con Pellegrini siempre se llevaba los tres puntos cuando era superior al rival; ahora tambi¨¦n lo logra en partidos de otra ¨ªndole al exhibir una firmeza in¨¦dita. Contra el Mallorca y Osasuna no tuvo actuaciones brillantes, pero demostr¨® su entereza. Una virtud que se personific¨®, por ejemplo, en Edgar Gonz¨¢lez (25 a?os). El hoy central verdiblanco estuvo infranqueable contra el equipo navarro, cuando el Betis jug¨® con once y cuando lo hizo con diez. Todo lo que pas¨® en el ¨¢rea, a excepci¨®n de una desatenci¨®n en la ocasi¨®n de Rub¨¦n Pe?a, estuvo bajo su control. Fue el faro defensivo del Betis. Se impuso en todos los duelos por alto, complet¨® 14 despejes y sum¨® cinco recuperaciones. Los ¨²ltimos cabezazos en el descuento evitaron el mal para un Betis que luce en la clasificaci¨®n de la Liga.

Por la m¨ªnima

El oficio de ganar tambi¨¦n se asienta ahora en la Real Sociedad. Del equipo de Imanol se destacan muchas cosas, pero casi nunca se habla de su aplicaci¨®n defensiva y su virtud resistente. Otra vez sac¨® a relucir ambas cualidades contra el Elche en alg¨²n tramo del segundo tiempo para defender la ventaja adquirida con el gol de Brais M¨¦ndez. De ah¨ª que no sea fruto de la casualidad que Imanol lleve 21 victorias como entrenador de la Real Sociedad por un gol a cero en Liga, seg¨²n enumer¨® Opta. Un registro que solo superan John Benjamin Toshack (38) y Alberto Ormaetxea (31) en la historia del conjunto donostiarra.

El jug¨®n y los acompa?antes

Iago Aspas apremia a Luis Enrique. Se le hace complicado al seleccionador sostener su decisi¨®n de no llamar al delantero del Celta, que ha empezado el curso desatado. El gol al Girona sell¨® el primer triunfo de la temporada del Celta donde la terna de mediapuntas ¡ªCarles P¨¦rez, ?scar y Cervi¡ª cumpli¨® con su papel. Aportaron movilidad y su talante ofensivo, m¨¢s trascedente en las sensaciones que en los propios n¨²meros (140 toques entre los tres), sirvi¨® a Aspas para dejar su esencia. El de Moa?a resolvi¨® con teloneros de lujo.